Acabamos de tener una bien gorda porque no suelta el móvil NUNCA. Ni en el baño, ni vistiéndose, NUNCA.
Total, que le he dicho que era adicto y todo el viaje me ha ido diciendo cosas que, la verdad, me han hecho llorar. Estoy aquí, en la puerta del cole, en doble fila, desahogándome con...