Sin lugar a dudas, mi marca preferida en auriculares es Sennheiser, y llevo usando desde hace años los Senheisser HD 650, que siguen acompañando mis escuchas musicales cuando estoy cerca de mi equipo principal. He intentado muchas veces cambiar a otros fabricantes y modelos, pero siempre llego a la conclusión de que los HD 650 son lo que me gusta, así que hace tiempo que decidí dejar de buscar y disfrutar de los dos pares que tengo.
Pero no siempre estás cerca de tu equipo de escritorio, así que la búsqueda de un equipo portátil que aúne comodidad y calidad de sonido con un perfil similar, ha sido también objeto de investigación por mi parte. He probado muchas cosas y estos IE 300 de Sennheiser fueron los que finalmente se quedaron en casa, aunque los he usado muy poco porque los auriculares inalámbricos y su conveniencia les han ganado la partida, y hoy los AirPods Pro de 2ª generación de Apple son los que uso.
Los Sennheiser IE 300 son un buen ejemplo de la calidad de construcción alemana. Extremadamente ligeros (4g sin cable) y bien terminados, con las cápsulas realizadas en una resina resistente y con una forma que se adapta bien a cualquiera, gracias a su sistema de sujección sobre la oreja y a su capacidad de girar sobre si mismas.
El cable de 1,2mm está reforzado con pararamida (como el Kevlar) y es indestructible. Es reemplazable y está terminado en conectores MMCX, aunque son específicos ya que tienen un diseño más corto que hace que no sirva cualquiera, pero en el mercado podéis encontrar opciones fácilmente, tanto en single-ended como en balanceado.
El sonido es típico de Sennheiser, dando mucha importancia a los medios para disfrutar de las voces y en este caso también a los graves, que son bien presentes. No son un perfil neutro, sino más bien todoterreno, pensados para que los disfrute la mayoría. Los agudos están ahí y a mi que me gusta el detalle me parecen suficientes, pero me gusta que no sean excesivamente brillantes para no cansar.
No necesitan amplificación, y ofrecen un sonido muy bueno desde el móvil, pero amplificados ganan aún más. Un sencillo DAC portátil como el FiiO KA-3 que uso con los FiiO FF3 mejora notablemente el sonido, pero te complica la portabilidad.
Con un precio de salida de 290€ eran caros, pero al precio de 110€ al que los vendo con envío certificado incluido a través de Correos, son una gran opción para disfrutar de un sonido de calidad.
Os dejo un enlace a la web del fabricante
global.sennheiser-hearing.com
Y el vídeo de presentación donde podéis ver con todo lujo de detalles tanto el exterior como el interior.
Y como de costumbre, acompaño el anuncio con unas fotos para que veáis con detalle el producto en venta. Los Sennheiser IE 300 servirían como regalo ya que están muy cuidados y con poco uso, siempre guardados en su funda de transporte - que es de las mejores que he tenido - acompañados de su caja original, en donde van no solo muy bien protegidos, también muy bien presentados.
Las copas son muy discretas, se colocan con facilidad pasando el arco sobre la oreja, pudiendo dejar el cable por delante o por detrás. La marca roja en el auricular derecho evita confusiones a la hora de ponértelos - no entiendo cómo no hacen todos algo parecido - y lleva un buen surtido de almohadillas en distintos tamaños y materiales. Yo he usado la de silicona, que es suave y se lleva mejor con mi oreja.
Retiro las almohadillas para que veáis que los auriculraes están perfectos, sin rastro alguno de suciedad.
La funda de transporte es ligera y muy resistente. Tiene espacio suficiente para añadir algún cable más.
Pero no siempre estás cerca de tu equipo de escritorio, así que la búsqueda de un equipo portátil que aúne comodidad y calidad de sonido con un perfil similar, ha sido también objeto de investigación por mi parte. He probado muchas cosas y estos IE 300 de Sennheiser fueron los que finalmente se quedaron en casa, aunque los he usado muy poco porque los auriculares inalámbricos y su conveniencia les han ganado la partida, y hoy los AirPods Pro de 2ª generación de Apple son los que uso.
Los Sennheiser IE 300 son un buen ejemplo de la calidad de construcción alemana. Extremadamente ligeros (4g sin cable) y bien terminados, con las cápsulas realizadas en una resina resistente y con una forma que se adapta bien a cualquiera, gracias a su sistema de sujección sobre la oreja y a su capacidad de girar sobre si mismas.
El cable de 1,2mm está reforzado con pararamida (como el Kevlar) y es indestructible. Es reemplazable y está terminado en conectores MMCX, aunque son específicos ya que tienen un diseño más corto que hace que no sirva cualquiera, pero en el mercado podéis encontrar opciones fácilmente, tanto en single-ended como en balanceado.
El sonido es típico de Sennheiser, dando mucha importancia a los medios para disfrutar de las voces y en este caso también a los graves, que son bien presentes. No son un perfil neutro, sino más bien todoterreno, pensados para que los disfrute la mayoría. Los agudos están ahí y a mi que me gusta el detalle me parecen suficientes, pero me gusta que no sean excesivamente brillantes para no cansar.
No necesitan amplificación, y ofrecen un sonido muy bueno desde el móvil, pero amplificados ganan aún más. Un sencillo DAC portátil como el FiiO KA-3 que uso con los FiiO FF3 mejora notablemente el sonido, pero te complica la portabilidad.
Con un precio de salida de 290€ eran caros, pero al precio de 110€ al que los vendo con envío certificado incluido a través de Correos, son una gran opción para disfrutar de un sonido de calidad.
Os dejo un enlace a la web del fabricante
IE 300
Sennheiser Headphones, Wireless Headphones, Headset, Microphones, Integrated System
global.sennheiser-hearing.com
Y el vídeo de presentación donde podéis ver con todo lujo de detalles tanto el exterior como el interior.
Y como de costumbre, acompaño el anuncio con unas fotos para que veáis con detalle el producto en venta. Los Sennheiser IE 300 servirían como regalo ya que están muy cuidados y con poco uso, siempre guardados en su funda de transporte - que es de las mejores que he tenido - acompañados de su caja original, en donde van no solo muy bien protegidos, también muy bien presentados.
Las copas son muy discretas, se colocan con facilidad pasando el arco sobre la oreja, pudiendo dejar el cable por delante o por detrás. La marca roja en el auricular derecho evita confusiones a la hora de ponértelos - no entiendo cómo no hacen todos algo parecido - y lleva un buen surtido de almohadillas en distintos tamaños y materiales. Yo he usado la de silicona, que es suave y se lleva mejor con mi oreja.
Retiro las almohadillas para que veáis que los auriculraes están perfectos, sin rastro alguno de suciedad.
La funda de transporte es ligera y muy resistente. Tiene espacio suficiente para añadir algún cable más.
Última edición: