En general le pasa lo mismo que a Wall-E, tiene dos mitades de tono muy diferenciado y la primera funciona mejor que la segunda, pero Up me ha gustado mas que la del robot. Porque si le quitas sus peros (sobre todo de parte de un guion que al final cae demasiado en el exceso cartoon, con incoherencias cantosas y cosas demasiado inverosimiles como convertir al abuelete artritico en el Stallone de Maximo riesgo) te quedan personajes absolutamente entrañables, un sentido de la aventura deliciosamente retro (ciertas fotos del final pueden hacer pensar que la pelicula no tiene lugar en pleno siglo XXI, sino un poco mas atras) y un buen puñado de momentos de autentico CINE que te llega. Y de ellos, los mejores son mudos, toma ya. Acompañados de una nueva gran obra de Giacchino.