¡Huy! Al final no dije nada de ésta...
Pues está muy bien
El tono es el mismo que las dos anteriores (no cuento la de los cuentos), el mundo es negro como Drácula o al menos Rumanía es un sitio del que escapar cuanto antes, mientras eres joven, o quedarte y esperar que otros tengan mejor suerte. Siguen aquí esos entornos opresivos, que los personajes intentan disfrazar con una capita de normalidad y de amabilidad, hasta que alguien tira de un hilo suelto y la cosa se desmadeja, filtrándose lo irreflexivo y lo miserable mientras intentan volver a taparlo como pueden.
Todo el tema moral de la película está tratado con una naturalidad aplastante y es de lejos lo más interesante, con Mungiu metiéndose como un conspirador más (aprovechando los planos sostenidos, en los que es evidente lo que se ha trabajado en el timing de los actores; sigue viéndose en este hombre que plantar la cámara en un sitio no tiene por qué conllevar vaguería); no justifica al padre, pero te tragas enteritas sus reacciones (ayuda el actor; también la hija). El tema sexual tres cuartos de lo mismo, huyendo del morbo.
Es cuando se aleja de ello cuando pierde la película, cuando parece que agote el tema y va añadiendo cosas sobre el novio de ella, el affaire, el matrimonio... o que quiera hacer algo general sobre su país (aunque está claro que para Mungiu, la "trama" es solo una extensión de ello), en vez de dejarlo más cerrado, más cercano mismamente a la propia
4 MESES.