Bumblebee (2018).................................. 10
Bumblebee: El Gigante de Hierro
Mi comentario:
¿Qué queréis que os diga? Me ha encantado, he salido de la sala de cine con una sonrisa de oreja a oreja. He revivido la experiencia que tuve viendo la primera entrega de Transformers, dirigida por Michael Bay, allá por el año 2007. Han pasado 11 años ya y aún parece que fuera ayer. Esta nueva entrega de la saga de Transformers, no se trata de ninguna secuela más al uso, es más bien un spin-off y esta vez lo tenemos centrado en en el querido Autobot llamado Bumblebee. En esta ocasión, Michael Bay no se pone tras la cámara, pero cede el testigo a, un casi novato en estas tareas, Travis Knight (su ópera prima fue Kubo y las dos cuerdas mágicas, por desgracia aún la tengo pendiente de visionado). Hablando de Bay (Dos Policías Rebeldes y la saga Transformers) se encarga de la producción del film junto a Lorenzo di Bonaventura (Meg) y el gran Steven Spielberg (Ready Player One). Este spin off está ambientado en los años ochenta, concretamente en el año 1987, o sea que ni el personaje encarnado por Shia Lebouf (Sam Witwicky) en las tres primeras entregas, ni el de Mark Wahlberg (Cade Yeager) en las dos restantes, no saldrán en la cinta, evidentemente. Esta vez, el reparto lo encabeza la guapa actriz Hailee Steinfeld (Valor de Ley, Dando la nota: Aún más alto) como la protagonista llamada Charlie, y junto a ella podemos ver a John Cena (Y de repente tú), Jorge Lendeborg (Spider-Man: Homecoming), Jason Drucker (Diario de Greg) y Gracie Dzienny (la fallida serie Zoo) entre otros.
Decir que esta cinta llega a estar dirigida por Bay y es un exitazo en su primer fin de semana. Knight, según un guión escrito por Christina Hodson y, como he dicho ambientado en los ochenta, ha sabido trasladarlo a la gran pantalla de muy buenas maneras. En resumidas cuentas, y sin que pongamos demasiados spoilers en el asador, es como una versión con Autobot de El Gigante de Hierro, la cual es una obra maestra de la animación. Y la que ahora nos ocupa, le va muy a la zaga. Acción, humor, drama, persecuciones, tensión, algunos guiños a la película de Transformers de 2007 y muchos toques ochenteros que a los fans y/o a los que disfrutan de la saga original dirigida por Michael Bay les va a molar. Por lo que a mí respecta ha sido así. Han habido muchos momentos que me han llegado al alma y me han tocado la fibra sensible. El buen uso de algunas canciones de la época, el vestuario, el product placement, el buen reparto, esos guiños al cine de Steven Spielberg o de John Carpenter (vía algunos pósters que vemos en una habitación), los maravillosos efectos visuales son para aplaudir, y la partitura de Dario Marianelli que, ya sé que no es Steve Jablonsky, pero lo hace muy bien, sinceramente, lo pondría a la misma altura. El segundo largometraje de Travis Knight es, señoras y señores, de diez. La única pega que le pongo es que se hace corta, y eso que dura casi dos horas, pero cuando uno se ve metido de lleno en la película no se pone a mirar el reloj. Espero que tenga éxito en la taquilla, porque lo tendría bien merecido. Mi nota final es de 10.
Bumblebee: El Gigante de Hierro
Mi comentario:
¿Qué queréis que os diga? Me ha encantado, he salido de la sala de cine con una sonrisa de oreja a oreja. He revivido la experiencia que tuve viendo la primera entrega de Transformers, dirigida por Michael Bay, allá por el año 2007. Han pasado 11 años ya y aún parece que fuera ayer. Esta nueva entrega de la saga de Transformers, no se trata de ninguna secuela más al uso, es más bien un spin-off y esta vez lo tenemos centrado en en el querido Autobot llamado Bumblebee. En esta ocasión, Michael Bay no se pone tras la cámara, pero cede el testigo a, un casi novato en estas tareas, Travis Knight (su ópera prima fue Kubo y las dos cuerdas mágicas, por desgracia aún la tengo pendiente de visionado). Hablando de Bay (Dos Policías Rebeldes y la saga Transformers) se encarga de la producción del film junto a Lorenzo di Bonaventura (Meg) y el gran Steven Spielberg (Ready Player One). Este spin off está ambientado en los años ochenta, concretamente en el año 1987, o sea que ni el personaje encarnado por Shia Lebouf (Sam Witwicky) en las tres primeras entregas, ni el de Mark Wahlberg (Cade Yeager) en las dos restantes, no saldrán en la cinta, evidentemente. Esta vez, el reparto lo encabeza la guapa actriz Hailee Steinfeld (Valor de Ley, Dando la nota: Aún más alto) como la protagonista llamada Charlie, y junto a ella podemos ver a John Cena (Y de repente tú), Jorge Lendeborg (Spider-Man: Homecoming), Jason Drucker (Diario de Greg) y Gracie Dzienny (la fallida serie Zoo) entre otros.
Decir que esta cinta llega a estar dirigida por Bay y es un exitazo en su primer fin de semana. Knight, según un guión escrito por Christina Hodson y, como he dicho ambientado en los ochenta, ha sabido trasladarlo a la gran pantalla de muy buenas maneras. En resumidas cuentas, y sin que pongamos demasiados spoilers en el asador, es como una versión con Autobot de El Gigante de Hierro, la cual es una obra maestra de la animación. Y la que ahora nos ocupa, le va muy a la zaga. Acción, humor, drama, persecuciones, tensión, algunos guiños a la película de Transformers de 2007 y muchos toques ochenteros que a los fans y/o a los que disfrutan de la saga original dirigida por Michael Bay les va a molar. Por lo que a mí respecta ha sido así. Han habido muchos momentos que me han llegado al alma y me han tocado la fibra sensible. El buen uso de algunas canciones de la época, el vestuario, el product placement, el buen reparto, esos guiños al cine de Steven Spielberg o de John Carpenter (vía algunos pósters que vemos en una habitación), los maravillosos efectos visuales son para aplaudir, y la partitura de Dario Marianelli que, ya sé que no es Steve Jablonsky, pero lo hace muy bien, sinceramente, lo pondría a la misma altura. El segundo largometraje de Travis Knight es, señoras y señores, de diez. La única pega que le pongo es que se hace corta, y eso que dura casi dos horas, pero cuando uno se ve metido de lleno en la película no se pone a mirar el reloj. Espero que tenga éxito en la taquilla, porque lo tendría bien merecido. Mi nota final es de 10.