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Abro este pequeño rincón, una especie de off dentro del subforo para soltar aquellos textos de blogs que veamos o pensamientos que nos asalten dentro de lo relacionado con los videojueos o la industria.
El caso es que leia un debate en davadá que es más viejo que el fuego, y la casualidad ha querido que me topara ahora con un artículo similar en este blog.
El caso es que no puedo dejar de ver un problema de fondo en estas reflexiones, atadas en parte a esa idea ingenua de creer que por abandonar el hobby del coleccionismo, el bolsillo de uno aparecerá magicamente recuperado de gastos innecesarios, cuando lo más probable es que dos dias después que dejes de comprarte ediciones coleccionistas, empezarás a gastar en otro capricho igual de inútil, ya que el derrochar es algo casi humano. Tampoco puedo dejar de ver estas "iluminaciones" asociadas a una cuestión de entorno, que normalmente no comparte nuestras aficiones, y que hace todo lo posible para llevarnos por un camino correcto basado en prejuicios.
Vamos, que no estoy de acuerdo.
El caso es que leia un debate en davadá que es más viejo que el fuego, y la casualidad ha querido que me topara ahora con un artículo similar en este blog.
Solo con leer el título seguro que no necesitais seguir, ya sabemos por donde van los tiros. No llego al extremo de ser un coleccionista de esos que salen en las foto del texto, gracias a mi limitadísima economia gasto en mis caprichos filtrando bastante (por ello no comparto esa necesidad de ver la luz que desprenden estas opiniones), pero tanto da si gastas mucho o poco, si tienes 1000 juegos o solo 30, de lo que se habla es de la inutilidad de acumular ciertos objetos. Puede que tampoco comparta el texto por no haberme independizado, asumir mayores responsabilidades como las que acarrea hacerse cargo de una casa o familia, o esos problemas en momentos de mudanza que también se esgrimen mucho.“La inutilidad del coleccionismo”
No hacemos más que quejarnos de lo caros que son los videojuegos, pero todavía hay demasiada gente que los sigue comprando por 70-80€.
Nos quejamos de los DLC, pero hacen ganar a las compañías casi (¿casi?) el mismo dinero que los videojuegos en sí. Y, para aportar nuestro granito de arena, no contentos con comprar el juego y el DLC, decidimos aumentar sus arcas con la gilipollez del coleccionismo.
Antes era algo que se veía muy pocas veces, pero ahora es raro el juego que no incorpora una “Edición Coleccionista”, mucho más cara que la original, y con añadidos totalmente inútiles: Nuevos trajes para los protagonistas, libros de ilustraciones, un extracto de la Banda Sonora, muñecos, camisetas…
Ser muy fan de un videojuego nos hace querer tener muchas cosas de él. Cosas inútiles que permanecen en nuestros armarios, estanterias o escritorios, de adorno, sin apenas uso. Y ojo, que no lo digo como crítica hacia los demás, sino como “víctima”. Yo he sido el primero en comprar merchandising de los videojuegos que me gustaban, y no había mejor regalo para hacerme que algo así. Pero llega un día en el que te das cuenta de que todo eso ha sido el dinero peor invertido de tu vida. Sin contar cuando compré Final Fantasy XIII por 80 eurazos. Precisamente fue esta compra la que me hizo abrir los ojos. No he vuelto a comprar ningún juego por más de 40€ ni merchandising de juegos, por mucho que me gustara el juego en sí.
Vamos a dejar de lado la ropa, pues una camiseta sí tiene utilidad. Pero, por ejemplo, tener una estantería llena de muñecos de videojuegos, ¿qué demuestra? Simplemente que nos sobraba el dinero (o a nuestros padres) y que no sabíamos en qué gastarlo. Cuando pasan unos años, tenemos que pagar facturas, y contamos hasta el último céntimo que gastamos… echas la vista hacia atrás y no puedes evitar lamentarte de lo bien que te habría venido ahora el dinero que malgastaste en el pasado. A no ser que ahora también te sobre el dinero, claro.
El coleccionismo no nos ciega solo en ese aspecto. Porque tú puedes querer tener todos los Final Fantasy, ya que vas a jugarlos, lo cuál sí se considera utilidad. Pero si eres coleccionista, dudo mucho que los compres en formato digital, ya que, aunque tengas todos, no es igual de bonito hacer una foto a tu catálogo de juegos bajados de la PlayStation Store, que hacer una foto a todas las cajas juntas encima de una mesa en tu casa. ¿Sirven para lo mismo? Sí. ¿Cuáles son más baratos? Generalmente las versiones digitales. ¿Cuál compramos para tener la colección? La versión física. Somos tontos.
Otro caso que se da es el de almacenar todos los videojuegos que nos hemos pasado, aunque estemos seguros de que no vamos a volver a jugar. Simplemente por tenerlos ahí. Mucho cuidado con esto, porque tener según qué juegos almacenados… puede ser considerado Síndrome de Diógenes.
No quiero con esto haceros sentir mal, o convenceros de que dejéis de comprar merchandising, si de verdad os gusta. Cada uno hace con su dinero lo que quiere. Pero solo digo una cosa: como algún día os haga falta pasta… vais a recordar esta entrada. Seguro.
El caso es que no puedo dejar de ver un problema de fondo en estas reflexiones, atadas en parte a esa idea ingenua de creer que por abandonar el hobby del coleccionismo, el bolsillo de uno aparecerá magicamente recuperado de gastos innecesarios, cuando lo más probable es que dos dias después que dejes de comprarte ediciones coleccionistas, empezarás a gastar en otro capricho igual de inútil, ya que el derrochar es algo casi humano. Tampoco puedo dejar de ver estas "iluminaciones" asociadas a una cuestión de entorno, que normalmente no comparte nuestras aficiones, y que hace todo lo posible para llevarnos por un camino correcto basado en prejuicios.
Vamos, que no estoy de acuerdo.