Manu, eres un auténtico "sobrao" contestando, y aunque me dan ganas de no responderte, lo haré porque Sisco está buscando un nuevo equipo y se debate entre lo que le gusta y lo que necesita.
En mi modesta opinión, la comparación de un Mac ejecutando Windows con Boot camp y un PC ejecutando Windows tiene sentido, y cuando digo que no es exactamente lo mismo no quiero decir que haya grandes diferencias, pero las hay.
La más importante de todas es que los drivers para el hardware del Mac sólo los proporciona Apple, y no son los primeros en su lista de prioridades, con lo cual en caso de haber algún problema, es más difícil encontrar soluciones.
Un buen ejemplo es el trackpad de los MacBook, seguramente el mejor dispositivo de entrada que se ha montado nunca en un portátil, pues no funciona ni parecido con Windows a través de Boot camp que con OS X, y eso claramente es un problema. En mi MacBook Air tuve que buscar un programa de un tercero para mejorarlo, pero tampoco se arrimaba a la experiencia OS X.
Dependiendo del equipo, puedes tener problemas con el resto de elementos de hardware, y siendo los Mac una arquitectura cerrada, si Apple no ofrece una solución, te quedarás a medio gas o con un problema de verdad.
Tener un Mac con Boot camp también puede ofrecer problemas con la estructura de particiones del disco. Los Mac están pensados para ejecutar OS X, y si le metes Windows con Boot camp, puedes tener problemas diversos, desde particiones de recovery que dejan de funcionar e incluso arranques problemáticos tras actualizaciones del sistema.
Pero la mayor diferencia yo la veo por el lado del crecimiento y de la expansión. Si quieres meterle un disco más a un PC, lo abres, lo conectas y a correr: cinco minutos. En un Mac Pro puedes hacer lo mismo, pero en los iMac la cosa se complica o directamente es imposible. Y lo mismo que digo de un disco, hablo de ampliar la gráfica, o de meter tarjetas adicionales como la comentaba más arriba.
Si conectas el cajón de Sonnet que muestras al puerto Thunderbolt de tu iMac, tendrás que consultar la tabla de compatibilidad en
http://www.sonnettech.com/support/charts/thunderbolt/index.html para comprobar que la tarjeta PCI que vayas a conectar esté soportada.
En general encontrarás las tarjetas PCI que se pueden conectar a un Mac Pro, pero si quieres conectar una tarjeta de sonido como la que decía o cualquier otra, necesitarás tener drivers para OS X, y ahí la inmensa mayoría del hardware que se fabrica para PC pincha, pues no tiene soporte por parte del fabricante para OS X.
El iMac está muy bien si asumes sus limitaciones, es una plataforma cerrada y estable que se lleva mejor con OS X que con Windows, aunque puede convivir con él instalado perfectamente y con pocos inconvenientes.
Un PC te dará otras ventajas y también otros inconvenientes. Como siempre hay que elegir, pues si existiera el sistema perfecto... Sisco ya lo tendría.