Me parece directamente un truñete y un intento desesperado por subirse al carro del último cine de terror indie (con La bruja como principal referente y el triangulito que hemos visto en ya no sé cuántas pelis), pero sin llegar a la suela del zapato, empezando por una puesta en escena de diseño, de imagenes tan preciosistas como vacuas del todo y que parecen más bien dignas de un videoclip de Lady Gaga o de Manson (a lo mejor es a lo que debería dedicarse el director)…
La impresión general es que no va a ningún lado, que el cuentecito tampoco es que rinda mucho y toca estirarlo a base de sueños, de pequeñas idas de olla (como lo de la setas) y de pretendidos giros de tuerca para completar metraje. La pretensión de crear atmósfera contrasta con recursos tan chusqueros como ese bicho que les persigue al principio, mientras que el cazador es el típico personaje que aparece y desaparece… además, parece que cada frase y cada diálogo están teñidos de una solemnidad un poco ridícula.
Luego la cosa trata de despertares sexuales, de desigualdades de género en tiempos sombríos (tiempos que, por otra parte, parecen muy descontextualizados de cualquier realidad histórica concreta), y cómo no, se suma (como no podría ser de otra manera en una versión moderna, alternativa, “no contada”, etc. de la historia) a un pseudo-feminismo de moda que en el fondo es pura autoayuda de pacotilla, o la nueva operación de marketing del tío Sam para vendernos por enésima vez su filosofía individualista, la reducción de toda cuestión a la “responsabilidad “, a las “decisiones” (lo contrario es comunismo) y clichés por el estilo… pero lo más irritante, y ya para rematar, es la cansina voz en off que no duda en dejárnoslo todo bien telegrafiadito con un discurso final que es un poco como para taparse la cara. Maravillosa actriz la muchacha (lo único bueno que puedo decir), si saliera en algo decente ya sería la repanocha. Ésto se la recomiendo sólamente a mi peor enemigo.