Kraftwerk prepara nuevo álbum para 2010

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Pues eso, que Ralf Hütter ha anunciado que, este invierno, el grupo se pondrá manos a la obra para crear un nuevo disco:

With a boxed set of its primary catalog on the way, Kraftwerk is eyeballing 2010 for the release of its first new album since 2003's "Tour De France Soundtracks."

Co-founder Ralf Hutter tells Billboard.com that with the group's 2009 live shows -- including some featuring 3-D background graphics and several with Radiohead -- the pioneering German electronic outfit has returned to its Kling Klang multi-media facility in Dusseldorf. "There's still time to go," Hutter reports, "but in the winter it's pretty gray here, so it's a good situation to go into the studio." As to what the album -- Kraftwerk's first without co-founder Florian Schneider, who left the group last November -- will sound like, Hutter says "it's still very early. It's still in its embryonic stage."

Hutter says he expects Kraftwerk to tour again once the album is completed and released.

Until that time, fans will be able to tuck into "The Catalogue," an eight-disc boxed set due out Nov. 17 that commemorates the 35th anniversary of Kraftwerk's breakthrough hit "Autobahn" and contains all the albums it released between 1974-2003. Each of the titles has been remastered and come in "mini-vinyl" wallet card packaging, with large-format booklets that replicate the artwork of the original releases. Additionally, 1986's "Electric Cafe" has been returned to its originally intended title, "Techno Pop."

Five of the titles, meanwhile -- "Autobahn," "Radio-Activity," "Trans Europe Express," "The Man Machine" and "Tour De France Soundtracks" -- have just been released as individual CDs. The other three albums are not currently licensed for separate release in the U.S.

"It's a piece of work that just had to be done," Hutter says of the catalog overhaul. "The quality (of previous CDs) wasn't always as it should have been...especially the artwork was just cut down from the LP format or scanned down, especially in America. Now we found the time to finish it, and we're very happy. You have everything from Kraftwerk in high (quality) formats."

Hutter says he also plans to upgrade the three Kraftwerk albums that preceded "Autobahn," though he won't predict a timetable for those. "When I find the time and go through the archives again, we'll do those also in a new format," he promises. "But my perspective now is forward for the next album."

A ver qué sale de todo esto, me pregunto si, aparte de Hütter, los miembros que tiene ahora el grupo participarán creativamente en las tareas de composición. Lástima del carácter del alemán, no hubiese estado mal que hubiese repescado a algún miembro de la formación clásica, como Karl Bartos, tras el hueco dejado por su colega de toda vida, Florian Schneider.

Un saludete.
 
Ufff, no sé, esto es para completistas muy iniciados, y yo estoy en un punto en el que este proyecto me atrae y me cansa con idéntica intensidad por la obsesiva explotación de Ralf Hütter del repertorio clásico kraftwerkiano. Y ya que las posibilidades de un nuevo álbum parecen cada vez más remotas (y quizá sea mejor así), puestos a exprimir la gallina de los huevos de oro, podrían tratar de rescatar material de la gloriosa gira de 1981 y publicarlo de una santísima vez.

Un saludete.
 
He estado viendo trozos de la versión resumida del concierto 3D, y lo que más me llama la atención es cómo Hütter no se ha molestado en encargar CGI's 3D algo más elaborados, muchos parecen demos de una versión del 3D Studio de hace 20 años. Y además todavía siguen usando imágenes procedentes de principios de los 90. Vamos, tiene que haber mogollón de artistas de diseño gráfico encantados de hacerles los diseños y animaciones gratis ...

Y repito, ¿por qué no sacan material audiovisual de la gira de 1981? ¿Tanta rabia le da a Hütter tener que acreditar a sus antiguos colaboradores (principalmente Wolfgang Flür) en vez de borrarlos de la historia del grupo cual Stalin musical?

Un saludete.
 
También he escuchado algunos de los conciertos que integran el megapack este, y en general, la reelaboración de los temas clásicos es bastante buena. Lo mejor de todo este pack es escuchar nuevas versiones de algunos de esos temas magistrales que, por algún motivo que desconozco, suelen quedar prácticamente olvidados.

Pero el concierto que más me ha impactado es el de 'Trans-Europa Express', quizá el álbum de sonido más germánico, y a la vez más abiertamente internacionalista del grupo. Lo han reelaborado de una manera casi sinfónica y épica, pero respetando la base tímbrica y rítmica del original, de manera que 'Europa Endloss' (tema que debería de ser un jodido himno, ahora más que nunca) casi parece un preludio wagneriano de belleza casi etérea, con Ralf Hütter cantando por una vez una letra con verdadera convicción y emoción en vez de su habitual postureo semirobótico. 'Spiegelsaal' por su parte, es ahora una oscura marcha semifúnebre cantada a dúo que sobrecoge el alma. Quizá 'Schaufensterpuppen' merecía una versión más cañera al estilo de la que tocaron en directo en 1981, pero también rinde a un buen nivel y cierra una reeinterpretación notable de un álbum singular por ser el más 'humanista' del grupo.

Un saludete.
 


Por fin, después de más de 10 años de espera, se puede ver con subtítulos en español este documental de nada menos que 3 horas de duración acerca de Kraftwerk y sus orígenes, entremezclados con los de toda la escena alemana underground de finales de los años 60 y principios de los 70, que sirvieron como impresionante telón de fondo al genial grupo. El documental retrata ni más ni menos que la creación de un nuevo estilo de música a partir del jazz, la música clásica , la psicodelia rock, el folk y las vanguardias audiovisuales, y su confluencia y mutación en algo completamente nuevo y distinto, donde Kraftwerk brilló con luz propia por su adopción de un estilo más pop y bailable, mezclado con una imaginería audiovisual que los hacían artistas totales, dueños no sólo de unas composiciones musicales brillantes, sino de todo un universo retrofuturista lleno de dobles y triples sentidos. Esto último creo que a la postre es su mayor legado, tanto o más que la música propiamente dicha, y lo que les hace merecedores de tocar en museos de arte moderno y no sólo en salas de fiestas.

Lo malo es que, a pesar de su extensa duración, el documental se queda corto, empezando por los mismos Kraftwerk, a los que despacha de manera muy precipitada a partir de los 80, cuando a pesar de su pírrica discografía de entonces aún tenía cosas muy interesantes que decir (o callar). Lo mismo pasa con la escena electrónica alemana, una vez aparece 'Autobahn' en el mercado, el documental se olvida prácticamente de los Klaus Schulze, Tangerine Dream, Harmonia, Ashra y muchos otros, que también hicieron música grandiosa aún a mediados/finales de los 70. O la falta de reconocimiento hacia artistas no alemanes que también bebieron de la vanguardia electrónica germana, o que la inspiraron. Resulta inaudito que despachen a Wendy Carlos como una mera versionadora de Bach, cuando a principios de los 70 publicó uno de los primeros ejemplos de protoambient, 'Sonic Seasonings', y aún en sus temas clásicos prácticamente desarrolló ella solita el tipo de timbres, con sus programaciones, filtros y efectos (incluyendo el vocoder), que proliferarían en la música electrónica de los 70. Es decir, los sintes suenan como suenan en buena parte gracias a Wendy Carlos, que para eso ayudó a Robert Moog a diseñarlos.

Por último, advierto que los subtítulos del documental no son perfectos, de hecho en bastantes ocasiones parecen pasados por el Google Translator, pero reflejan más o menos acertadamente lo que se dice, aunque muchas veces haya que tirar del oido entrenado en la lengua inglesa para corregir mentalmente no pocas expresiones sin sentido en castellano.

Un saludete.
 
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Joer :llanto. Schneider, a través de los relatos que he leído sobre el grupo, parece ser que era el cazatalentos que buscaba y escogía a los colaboradores que ayudaron a dar forma al sonido y la estética (artistica y tecnológica) del grupo en sus mejores momentos. Quizá por eso mismo parece ser que él infravaloraba su aportación al grupo. Por declaraciones de sus excompañeros, no era un músico especialmente dotado, pero debía de ser un tipo muy culto (como niño bien que era), especialmente sociable y carismático a su manera, a pesar de su apariencia tímida y enigmática. No en vano Bowie le dedicó una canción del Heroes. Y también debía de ser muy paciente, porque fue capaz de aguantar a un señor como Ralf Hütter durante 4 décadas.

D.E.P.

Un saludete.
 
Última edición:
Últimamente me he hecho con la autobiografía que Karl(heinz) Bartos (miembro fundamental de la formación clásica de Kraftwerk) publicó hace un par de años, 'The Sound of the Machine'. Es un volúmen bastante impresionante (600 páginas + fotos), y aunque apenas llevaré unas 150 (más o menos me quedé en la gira del Autobahn), llaman la atención las similitudes y diferencias con el libro que publicase su excompañero y amiguete Wolfgang Flür hace 25 años. Bartos es claramente un músico de pura cepa, que estudió en el conservatorio y tocó todo lo que se podía tocar en aquella época y lugar, tanto en instrumentos (piano, percusión, vibráfono, guitarra ...) como en repertorio (tanto pop/rock como música clásica). Por lo tanto, el libro de Bartos se centra bastante en el comentario musical de las obras que ha escuchado e interpretado, sin dejar de lado la biografía y algunos apuntes sobre el contexto social en el que se desarrolló. En cambio, Flür, que era el típico batería eficaz pero sin pretensiones, se centraba más en la parte social, íntima y farandulera, aunque creo que escribe mejor que Bartos, a pesar de que su libro tenía también mucho relleno que no interesaba a nadie.

En cualquier caso, no deja de ser fascinante ese mundo de la juventud en la Alemania (federal, claro) de los 60 y 70 que nos muestra el señor Bartos, con sus jóvenes músicos hinchándose a bolos para soldados de las tropas aliadas aún estacionadas allí, el desarrollo de la clase media entre los 50 y los 60 y sus condiciones de vida, las diferencias generacionales, y el deseo (consciente o inconsciente) de la juventud de sacudirse a toda costa el estigma de su historia reciente y recuperar una identidad nacional, o más bien cultural. En este sentido, el relato es muy similar al de Flür (más o menos ambos empezaron igual en la música), pero como ya digo, pronto deriva a un conciso pero interesante comentario musical.

Lástima que ya no podamos conocer por ejemplo la versión de Florian Schneider de la historia del grupo, aunque siendo sincero, de haber vivido más tiempo dudo que hubiese escrito nada (si apenas decía algo en las ya de por sí contadas entrevistas a Kraftwerk). Y de Hütter, ensimismado en perpetuar la mística del grupo cuando ya se va acercando a los 80 palos, probablemente tampoco habrá que esperar nada en el futuro, así que el único relato que nos va a quedar de primera mano del grupo es el de Bartos y Flür. Y a Diox gracias, oye.

Por cierto, que el señor Bartos estrenó a principios de este año una BSO compuesta por él para 'El gabinete del doctor Caligari', con la que anda de gira por ahí:



La verdad es que la he escuchado durante un rato, y no deja de ser la típica BSO moderna para películas mudas que te puedes encontrar en otras tantas. Tiene momentos curiosos, pero bueno, también para juzgar habrá que verla junto con las imágenes. Lamentablemente, creo que no hay todavía ningún montaje de la peli y la BSO disponible por ahí, aunque con algún programilla no debe de ser difícil hacerlo uno mismo, pero ahora mismo no tengo tiempo para andar trasteando con estas cosas :sudor .

De todas maneras, a mí el trabajo en solitario del señor Bartos no me llama la atención. Está claro que seguramente le debemos algunas de las partes melódicas y rítmicas más gloriosas de Kraftwerk, pero me da la sensación de que de diseño de sonido (algo fundamental en la música electrónica para que no suene a Camela en su época de gasolinera) anda más que justito, por lo que sus discos, salvo algún corte en particular, no me llenan demasiado. Ahí es donde se nota que los mejores Kraftwerk eran la suma de las partes, cuando había músicos dentro y una visión común, y no operadores de vídeo metidos a músicos como en la formación actual. Y así están, sin material nuevo desde hace 20 años ni tampoco se le espera ...

Un saludete.
 
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