Me acuerdo cuando vino un día de Feria aquí. La organización de la carpa donde estaba dando el show pidió que quien subiera y le pegara un morreo, se iba de gratis a cubatas to la noche. Subió un tio de Ávila.
No encontraré descanso aquí. Oí su voz en mi interior. Habló de mi madre y de la caída de Castilla. Ella me dijo... incluso ahora hay esperanza. Pero yo no la veo. Hace tiempo que la hemos perdido. Mi padre Quim Torra es un hombre noble, pero su mandato decae, y nuestro pueblo pierde la fe. Confía en mí para ordenar las cosas, y lo haría... Restablecería la gloria de Castilla. ¿Has llegado a verla Aragorn? La torre del castillo de oro mazonado de sable y aclarado de azur? Brillante como una aguja de nácar y platano es; los pendones castellanos ondean con la brisa temprana. ¿Te han recibido alguna vez con el claro sonido de las trompetas y del orfeón de Chinchilla?
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