Push
Hay películas que son lamentables hasta dejándote el cerebro fuera. No entiendo, la verdad como alguien puede dar luz verde a tal cúmulo de despropósitos e intentar venderlo como la mejor película de acción del año (si tenemos en cuenta que es lo único que se ha estrenado en lo poco que llevamos, pues si, es posible). Pero no se dejen engañar por un poster molón o por un trailer que anuncia Jumper 2. Esta película es una mierda.
El primer fallo es que la película es aburrida de narices. ¿Por qué? En primer lugar la complejidad innecesaria que le ponen al principio a la película (hay distintos tipos de mutantes que tal y tal, estos se llevan mal con estos y estos se llevan mal con los otros). ¿Valor en el "guión" o en la "trama"? 0 En segundo lugar porque ni llama la atención ni interesa. En tercer lugar porque existe una cosa que se llama "personaje", y a esa cosa hay que definirla, saber un poco su personalidad, que hace, a dónde va, de dónde viene... Aquí no tenemos nada de eso, sale un pavo, se encuentra con una niña de doce años con apariencia de diecimuchos, hablan de noseque y pasan cosas ridículas. Al poco salen unos chinos gritones que producen más dolor que el último disco de King Africa con su sonido.
Por otra parte es una película que no es original. ¿Por qué? Pues porque intenta ser un cúmulo de un montón de películas, intenta ser la película no oficial de la serie Heroes y cree que por tener efectos especiales ya atraera a un buen número de público. Pues no, no es así. Es lamentable que tengan la poca vergüenza de proyectar eso en algo que puede producir tanta magia como una pantalla de cine. Es un insulto, un robo a mano armada que se realiza tras haber descubierto que te han llamado gilipollas a la cara cuando empiezan a salir chinos gritones, un negro molón interpretado por un buen actor cobrando cheques, unos "actores" jovenes que hacen bueno a Jorge Sanz y una historia que directamente es de risa. Y la resolución final de carcajada limpia. Por lo menos podían haber recurrido al tópico y hacer una pelea tipo Goku entre el negro molón y el protagonista en lo alto de un rascacielos. Pero nada, el presupuesto se había acabado creando pistolas voladoras.
Una película no necesita muchas cosas para funcionar en sus propósitos. Tenemos por ahí cintas como Wanted o Taken que con una historia más simple que el mecanismo de un botijo resultan treméndamente entretenidas y dignas dentro de su género, películas que por otra parte gusta ver de vez en cuando y que te dan lo que buscas de una forma honesta, sin que le puedas sacar demasiadas pegas debido a su simplicidad. Pero claro, después una pequeña productora norteamericana apoyada por Mel Gibson se ponen e intentan buscar recuperar los cuatro duros invertidos en una época en la que no hay muchos estrenos con una cinta que directamente es un insulto. A la hora de hacer una película es importante tener un guión, o al menos algo que funcione en pantalla. Pero no, tenemos un proyecto de trilogía chusca que no interesa a nadie sin guión. Y eso es algo de lo que el director, el mismo que el de El caso Slevin debería saber ya que su anterior película si por algo funcionaba es por que al menos tenía un guión simpático y unos buenos actores que te hacían tragártelo.
Nota: PM