La más dolorosa renuncia de Podemos para poder formar Gobierno: la reforma laboral no será derogada
“Quien algo quiere, algo le cuesta”. Después de la repetición electoral, este dicho ha sido rápidamente asumido por
Unidas Podemos, que
se ha olvidado de algunas de las exigencias planteadas en verano con tal de conseguir el
pacto con el PSOE para llegar a un Gobierno de coalición.
El propio
Pablo Iglesias hizo pública el viernes una carta abierta a la militancia de Podemos para anunciarles las
renuncias que van tener que asumir como condición para que salga adelante su
alianza con Pedro Sánchez.
El ahora candidato a vicepresidente reconoció: “Vamos a gobernar en minoría dentro de un Ejecutivo compartido con el PSOE, en el que
tendremos que ceder en muchas cosas”.
Esa coalición –añadía Pablo Iglesias- “nos llevará a
muchos límites y contradicciones”.
Renuncia a una reivindicación histórica
Según ha podido saber
Confidencial Digital, la
primera gran cesión de Unidas Podemos para formar gobierno con el PSOE, y quizá la más dolorosa, ha sido renunciar a una de las grandes reivindicaciones del partido desde su fundación en 2014: la
derogación de la reforma laboral.
Pablo Iglesias aseguró, durante la última campaña electoral, que solo si él y su partido entraban en el Gobierno, se podría garantizar el final de una ley, aprobada por el Ejecutivo de Rajoy en 2012,
que el PSOE “no ha querido derogar” en año y medio.
Ese discurso ya fue empleado el pasado mes de julio, cuando fracasaron las negociaciones para formar un Gobierno de coalición y garantizar la
investidura de Pedro Sánchez. En aquellos días, desde Podemos se llegó a afirmar: “Es muy triste que, en víspera de una investidura, aún
no se nos diga si van a derogar la reforma laboral y de pensiones”.
Pese a todo lo dicho estos últimos meses, Iglesias y la formación morada han aceptado la
hoja de ruta propuesta por el PSOE en relación con esa ley, que no será derogada como tal.
Eliminar los artículos más “lesivos”
Así lo han revelado tanto Adriana Lastra como Rafael Simancas a los líderes de los partidos políticos con los que se reunieron la semana pasada, en la
búsqueda de apoyos a la investidura de Pedro Sánchez.
La portavoz y el secretario del Grupo Socialista en el Congreso afirmaron a sus interlocutores que el futuro Gobierno, formado por PSOE y Unidas Podemos,
eliminará únicamente los artículos considerados “más lesivos” de la reforma laboral. Una hoja de ruta marcada desde hace meses por Sánchez y Calviño, y que Iglesias ha aceptado.
Despido por bajas sucesivas
El PSOE no ha dado aún muchos detalles sobre cuáles son, exactamente, los artículos a derogar, pero las fuentes consultadas por
ECD destacan que sí se suprimirá la posibilidad de que una empresa pueda
despedir de manera procedente a una persona
tras varias bajas intermitentes pero justificadas.
Se trata de una medida polémica, pero que
avaló el propio Tribunal Constitucional en octubre, provocando un duro pronunciamiento en contra del presidente en funciones. Según el TC, tal posibilidad no contradice el texto de nuestra Constitución.
Nuevo estatuto de los trabajadores
Junto a esta medida, el PSOE también ha propuesto a Unidas Podemos la
aprobación del nuevo “Estatuto de los Trabajadores del siglo XXI”, que tendrá que pactarse tanto con los sindicatos como con las empresas.
El nuevo texto, afirman los socialistas, “deberá garantizar la protección de los trabajadores y trabajadoras frente a los
desafíos sociales, tecnológicos y ecológicos del siglo XXI, reforzando su participación en las decisiones de las empresas y recuperando el papel crucial de la negociación colectiva".
Para ello, tal como aparecía en el programa electoral del PSOE, se elaborará “una carta de derechos de los trabajadores y trabajadoras que actualice el catálogo de derechos a las exigencias de la digitalización, incluyendo el
derecho a la desconexión”