Ichan, no lo sé, y ante la duda prefiero no ser un desgraciado. Que lo sean otros.
Y me parece muy loable. De hecho, yo tampoco he aprovechado la ocasión para burlarme de ella, porque no me gusta hacerlo y porque además es que lo que haga o deje de hacer esta chica me resulta totalmente indiferente.
Pero no cabe duda que en la actual sociedad de la transparencia, todos estamos sometidos al juicio público. Quien más y quien menos, participa en foros, blogs, redes sociales, y sus comentarios quedan a la vista de todos. Y cuando uno dice o hace tonterias (independientemente de si estás sano o cuerdo), se expone a que los demás le critiquen. Si no quieres correr ese riesgo, no participes en internet.
No me gusta que la gente aproveche cada tropiezo de los famosos para hacer escarnio público de ellos (casos como los de #TurismoBisbal o #HolocaustoVigalondo, por ejemplo), como si fueran hienas, pero me parece justo que si la gente pone a parir a los políticos cada vez que sueltan tonterías por la boca, pues si a una persona la pillan mintiendo descaradamente a todo el mundo, a lo
Pedro y el lobo, entiendo que la gente no se vaya a quedar callada.
¿Que a lo mejor Allen está enferma, y por culpa de todo esto decide quitarse la vida? A lo mejor sí, a lo mejor no, pero si vamos por ahí con miedo a que nuestros comentarios hirientes puedan conducir a otras personas al suicidio, no nos atreveríamos a hablar nunca. Si no nos metemos con Allen por si acaso está enferma, tampoco lo hagamos con los políticos, no vayan a encontrarse en la misma situación.