Terminado en su versión remaster que añade resolución cercana a 4K y un nuevo motor de iluminación, que si bien queda de la leche en los escenarios, con los personajes no termina de cuadrar, haciendo que luzcan peor que en PS3/360.
La historia es flojilla, lo del presente es directamente para matarlos y el setting elegido es un poco meh. Tiene decisiones que tienen tela, como por ejemplo las animaciones de los menús, que enlentecen la dinámica del juego y solo hacen gracia las primeras horas. Siendo un Assassin's, el juego tiene un problema con los puntos de agarre al trepar por rocas o árboles. Muchas veces funcionan fatal y el personaje no termina de agarrarse donde sí se puede agarrar. A parte las pistas visuales para trepar rocas (plantitas) NO significan que ese sea el lugar de agarre, sino justo al lado, lo que no tiene mucho sentido.
Si quieres hacerte el 100%, tienes que hacer una ristra de requisitos que en algunas misiones es una gincana completamente absurda, en plan "puedes matar pero sólo dos veces y debe ser con X arma y saltando desde un junco a la pata coja sin tocar el suelo y sin que un perro te detecte". A veces el texto es tan largo que da hasta risa.
Eso sí, musicote y los barcos muy divertidos.
Y cuando parecía que todo iba a seguir igual, me meto en el DLC La Tiranía del Rey Washington y me encuentro una historia divertidísima, con nuevas mecánicas, nuevos escenarios, mejores cinemáticas, mejores diálogos, nuevas habilidades, y una banda sonora completa del mismo calibre de la del juego principal, que me hace preguntarme si esto lo ha hecho la misma gente.