Lo más gracioso del asunto es que so suyo es una pose. Es de familia bien, y MUY pija cuando era joven (conozco a compañeros suyos de instituto). Fue ponerse el micro en la boca, y transformarse.
Por cierto Manu,a los más "revindicativos" que he conocido en mi vida siempre les esperaba una buena casa de sus "papis" y todo tipo de comodidades después de "pasar el ratillo" manifestándose o cosas por el estilo.
¿Qué tiene que ver una cosa con la otra? ¿Por haber nacido en una familia con pasta, ya tienes que ser pijo e ir por ahí presumiendo de las pelas de tu familia? ¿Y qué tiene que ver lo que uno es de adolescente con lo que uno es de adulto? Yo cuando tenía 15 años solo escuchaba Los 40 y solo veía cine comercial y series de Globomedia y los libros más sesudos que había leído eran las novelas de Flanagan. Recriminar el comportamiento actual de una persona en función de sus orígenes familiares o de lo que fue alguna vez en el pasado me parece un sinsentido. Es perfectamente plausible ser de familia adinerada y a pesar de ello renunciar al lujo y a la ostentación.
Por otra parte, es lo más normal del mundo que la gente más "reivindicativa" sea la gente que menos necesidad tenga de reivindicar nada. Ya lo decía Maslow: la gente que tiene cubiertas todas sus necesidades básicas es la que se puede empezar a preocupar por los problemas de los demás. A lo largo de la historia de la humanidad, los que más se han preocupado por defender los derechos de las minorías y luchar contra las injusticias sociales casi siempre han sido ricos y aristócratas que podían servirse de su privilegiada posición en el sistema para cambiar las cosas desde dentro (el peón difícilmente puede hacer nada desde su posición). Yo también a los 20 años cuando vivía del sueldo de mis papis también era mazo "reivindicativo"; ahora que tengo que pagar yo mis propias facturas y me tengo que preocupar por evitar llegar a números rojos al final de cada mes, ya no puedo "perder mi tiempo" en manifestaciones y reuniones de ASF, ni donar un duro a Cruz Roja o Save The Children. Como decía Ortega y Gasset, uno es uno y sus circunstancias, y a medida que las circunstancias cambian, nosotros lo hacemos con ellas.