Hola Carlos, ¿cómo hace para fingir que está viendo películas en Cannes cuando todos sabemos que está de juerga por ahí?
Siempre he tenido una gran capacidad de inventiva. Y una notable desvergüenza. Ayer por ejemplo me salí a las dos horas de una inenarrable película rumana. Duraba una hora más. Y mi salud mental me obligó a perderme el desenlace. Pero me cuentan hoy que los críticos han escrito que es la hostia de buena. Que hay un antes y un después en la historia del cine después de la película 'Sierranevada', dirigida por un tal Cristi Puiu, el nuevo genio del cine rumano, que al parecer va a estar de moda entre la idiotez durante un tiempo razonable. Pero del resto no me he salido. Incluida una preciosidad de Woody Allen titulada 'Cafe Society'. ¿Y qué me pregunta usted? Que sí, que en Cannes se sigue comiendo y bebiendo muy bien.
Hola Carlos. Siempre me he preguntado que hace un crítico de cine en Cannes, aparte de ver películas. Imagino que después de tantos años ya conocerás la ciudad y sus secretos. Me puedes dar pistas de qué hacer allí. Quiero ir. Gracias!
Ver pivones en todos los sitios. Tantos que te puede dar un mareo o pillar una tortículis. En La Croisette, en los bares, en los restaurantes, en los hoteles, en la rue d'Antibes. Y si es usted gay le digo lo mismo. Imagino que una parte considerable de ellas y ellos a precios escándalosos. Pero todo es carísimo en Cannes. Yo como ya soy muy viejo y llevo media vida viviendo a Cannes solo me dedico a pasar infinitas horas en las salas viendo cine de autor. ¿A que se lo ha creído?
Hola, Carlos. Estoy convencido de que te fijas en las mujeres de Cannes tanto (¿más?) que en sus películas. ¿Para cuándo una crónica sobre ellas?
No sea usted frívolo. Me pagan por hablar de las películas. Algo que frecuentemente se convierte en un infierno. Sería más divertido que escribiera de lo que auténticamente le otorga alegría a mis ojos. Pero ya sabe, la vida es así.
“En Cannes se sigue comiendo y bebiendo muy bien”