Desde que vi Firefly, encumbré a Nathan Fillion como uno de los actores televisivos más carismáticos de nuestra época. También tuvo una aparición en la serie Buffy (ambas de Whedon).
Pues bien, he podido ver el piloto de su nueva serie "Castle" de la que ya hay tres o cuatro episodios, ¿y que se puede decir? Que a priori promete ser muy interesante. Un cruce entre Luz de Luna y Californication. Fillion interpreta a Rick Castle, un escritor archi conocido, podrido de pasta y con el mundo plagado de admiradores (policías, jueces, el alcalde...) que escribe novelas de misterio con tendencia a narrar asesinatos macabros. Todo empieza con la salida al mercado de su última novela, donde mata a su personaje estrella, un detective a lo Sherlock Holmes. Atraviesa un bloqueo creativo, y su agente (y zorrona ex-esposa) amenaza con llevarle a la quiebra si no muestra indicios de estar trabajando en serio en un nuevo libro.
Quiere la suerte que un asesino aparezca en escena, imitando los crímenes de sus novelas. La policía le detiene y tras comprobar su inocencia, le piden que se una al equipo de investigación como asesor. Pronto tendrá problemas (y no tardará en tener algo más) con la agente Beckett, con la que mantiene un tira y afloja de tensión sexual con una intensidad, ya en el piloto, que no veía desde la dichosa Luz de luna. Reíros de las parejitas de Perdidos Jack/Kate/Sawyer, etc...
El caso es que el tipo tiene la mente de un crío cabrón de cinco años y es incapaz de aceptar un no por respuesta. Y encima, suele tener razón en todo, ya que después de pasarse años escribiendo sobre crímenes, tiene bastantes conocimientos. Al final, interesado por la Beckett, decide usarla como personaje principal para una nueva serie de novelas, y pide a sus admiradores en las altas esferas que le pongan como colaborador permanente suyo.
La serie, como ya digo, promete bastante, con muchos puntazos humorísticos y secundarios varios que pueden dar mucho juego (la ex-esposa cabrona, la madre chiflada, la hija...) pero sobre todo, en el carisma de la pareja protagonista y en los piques mutuos en los que se enzarzarán (acabando en lío/bodorrio presumiblemente). Me ha dejado con ganas de más, en resumen.
Pues bien, he podido ver el piloto de su nueva serie "Castle" de la que ya hay tres o cuatro episodios, ¿y que se puede decir? Que a priori promete ser muy interesante. Un cruce entre Luz de Luna y Californication. Fillion interpreta a Rick Castle, un escritor archi conocido, podrido de pasta y con el mundo plagado de admiradores (policías, jueces, el alcalde...) que escribe novelas de misterio con tendencia a narrar asesinatos macabros. Todo empieza con la salida al mercado de su última novela, donde mata a su personaje estrella, un detective a lo Sherlock Holmes. Atraviesa un bloqueo creativo, y su agente (y zorrona ex-esposa) amenaza con llevarle a la quiebra si no muestra indicios de estar trabajando en serio en un nuevo libro.
Quiere la suerte que un asesino aparezca en escena, imitando los crímenes de sus novelas. La policía le detiene y tras comprobar su inocencia, le piden que se una al equipo de investigación como asesor. Pronto tendrá problemas (y no tardará en tener algo más) con la agente Beckett, con la que mantiene un tira y afloja de tensión sexual con una intensidad, ya en el piloto, que no veía desde la dichosa Luz de luna. Reíros de las parejitas de Perdidos Jack/Kate/Sawyer, etc...
El caso es que el tipo tiene la mente de un crío cabrón de cinco años y es incapaz de aceptar un no por respuesta. Y encima, suele tener razón en todo, ya que después de pasarse años escribiendo sobre crímenes, tiene bastantes conocimientos. Al final, interesado por la Beckett, decide usarla como personaje principal para una nueva serie de novelas, y pide a sus admiradores en las altas esferas que le pongan como colaborador permanente suyo.
La serie, como ya digo, promete bastante, con muchos puntazos humorísticos y secundarios varios que pueden dar mucho juego (la ex-esposa cabrona, la madre chiflada, la hija...) pero sobre todo, en el carisma de la pareja protagonista y en los piques mutuos en los que se enzarzarán (acabando en lío/bodorrio presumiblemente). Me ha dejado con ganas de más, en resumen.