No creo que sigan, así queda bien, aunque una segunda temporada aún sin Bertomeu sería una idea seductora. Deja flancos abiertos para seguir. Llega la hija honesta a la dirección, pero claro, la economía de los corruptos de una comarca dependía de lo que decidiese Bertomeu. Él no era el corrupto, lo eran los demás, aquellos a quienes podía manejar a su antojo a cambio de miserias. Pero claro, todo buen malo ha de morir. En este caso acorralado por todo se quita de en medio, se suicida... sí, cuando se acercaba a la cabaña del viejo sabía perfectamente que iba a pasar. La única manera de seguir con Costa Azul era quitándose él de en medio. Pero a la hija no la dejarán ir por el camino limpio, y ella tendrá que ceder. Y en el fondo sabemos que ella tiene más huevos que su padre, y su padre así lo sabía. Sí, parece limpia, pero cuando empiece a ver como era el negocio de su padre ella aprenderá rápido. Lo hará de otra manera, pero manejará igual que lo hacía su padre.