Todo pronunciado en su extraño dialecto incomprensible para la mayoría de habitantes de la Península Ibérica.
El Ministerio de Industria ha abierto un expediente sancionador contra Telecinco por la emisión de contenidos con "referencias sexuales explícitas" dentro del programa Sálvame diario, que se emite en la franja de tarde y dentro del horario de protección para los menores, que abarca desde las seis de la mañana hasta las diez de la noche. Industria estima que en el espacio que presenta Jorge Javier Vázquez se han emitido escenas susceptibles de perjudicar "el desarrollo físico, mental o moral" de los menores. La infracción podría ser sancionada con una multa de hasta 300.000 euros.
Telecinco eludió ayer hacer comentarios sobre la incoación de este expediente. "Oficialmente no nos han comunicado ninguna sanción", dijo un portavoz de la cadena. Añadió que existen "conversaciones pendientes" sobre el asunto.
La decisión de Industria se produce después de que la Subdirección General de Medios Audiovisuales examinara una queja remitida por el Consejo Audiovisual de Andalucía (CAA) sobre Sálvame diario. Concretamente, sobre la emisión del 20 de octubre de 2009, en la que una de las colaboradoras del espacio de cotilleo "sacó varios objetos de temática sexual y reprodujo escenas sexuales con otra invitada del programa", según la queja recibida por el CAC de una espectadora gaditana.
El CAA remitió la protesta a la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información (Catsi), organismo dependiente de Industria. La autoridad audiovisual andaluza sólo tiene competencias en el ámbito autonómico, de modo que rebotó el asunto al Catsi.
En septiembre, el CAA alertó del "preocupante incremento de la telebasura en horario infantil" a través de algunos programas cuyo objetivo principal es "la exhibición impúdica de la intimidad de los personajes famosos o mediáticos". Y especificaba que en ocasiones esos programas "conculcan el derecho de los menores a acceder en horario infantil a espacios que en ningún caso puedan perjudicar su desarrollo mental o moral o fomente actitudes y valores contrarios a los principios cívicos y democráticos básicos".
Industria examinó una segunda queja del CAA contra Sálvame por utilizar -de manera "no esporádica"- un lenguaje "inadecuado para menores". Pero en este caso no ha optado por incoar un expediente sancionador sino por trasladar el asunto al Comité de Autorregulación, encargado de verificar el cumplimiento del código suscrito por todas las cadenas. El Catsi, que ha unido esta reclamación a otra serie de quejas de particulares que ha recibido, considera que la denuncia remitida por el consejo andaluz supone un "incumplimiento" de las disposiciones del Código de Autorregulación.
A falta de un Consejo Audiovisual Estatal (cuya creación está prevista en la futura Ley General de la Comunicación Audiovisual), el ministerio que dirige Miguel Sebastián lleva a cabo el seguimiento, control e inspección de los contenidos televisivos. Y, en consecuencia, también se encarga de imponer sanciones en caso de que las cadenas vulneren la ley.
Industria abre un expediente contra 'Sálvame'
Verifica que ha emitido contenidos que pueder perjudicar a los menores
[url]http://www.elpais.com/articulo/Pantallas/Industria/abre/expediente/Salvame/elpepirtv/20100106elpepirtv_1/Tes[/URL]El Ministerio de Industria ha abierto un expediente sancionador contra Telecinco por la emisión de contenidos con "referencias sexuales explícitas" dentro del programa Sálvame diario, que se emite en la franja de tarde y dentro del horario de protección para los menores, que abarca desde las seis de la mañana hasta las diez de la noche. Industria estima que en el espacio que presenta Jorge Javier Vázquez se han emitido escenas susceptibles de perjudicar "el desarrollo físico, mental o moral" de los menores. La infracción podría ser sancionada con una multa de hasta 300.000 euros.
Telecinco eludió ayer hacer comentarios sobre la incoación de este expediente. "Oficialmente no nos han comunicado ninguna sanción", dijo un portavoz de la cadena. Añadió que existen "conversaciones pendientes" sobre el asunto.
La decisión de Industria se produce después de que la Subdirección General de Medios Audiovisuales examinara una queja remitida por el Consejo Audiovisual de Andalucía (CAA) sobre Sálvame diario. Concretamente, sobre la emisión del 20 de octubre de 2009, en la que una de las colaboradoras del espacio de cotilleo "sacó varios objetos de temática sexual y reprodujo escenas sexuales con otra invitada del programa", según la queja recibida por el CAC de una espectadora gaditana.
El CAA remitió la protesta a la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información (Catsi), organismo dependiente de Industria. La autoridad audiovisual andaluza sólo tiene competencias en el ámbito autonómico, de modo que rebotó el asunto al Catsi.
En septiembre, el CAA alertó del "preocupante incremento de la telebasura en horario infantil" a través de algunos programas cuyo objetivo principal es "la exhibición impúdica de la intimidad de los personajes famosos o mediáticos". Y especificaba que en ocasiones esos programas "conculcan el derecho de los menores a acceder en horario infantil a espacios que en ningún caso puedan perjudicar su desarrollo mental o moral o fomente actitudes y valores contrarios a los principios cívicos y democráticos básicos".
Industria examinó una segunda queja del CAA contra Sálvame por utilizar -de manera "no esporádica"- un lenguaje "inadecuado para menores". Pero en este caso no ha optado por incoar un expediente sancionador sino por trasladar el asunto al Comité de Autorregulación, encargado de verificar el cumplimiento del código suscrito por todas las cadenas. El Catsi, que ha unido esta reclamación a otra serie de quejas de particulares que ha recibido, considera que la denuncia remitida por el consejo andaluz supone un "incumplimiento" de las disposiciones del Código de Autorregulación.
A falta de un Consejo Audiovisual Estatal (cuya creación está prevista en la futura Ley General de la Comunicación Audiovisual), el ministerio que dirige Miguel Sebastián lleva a cabo el seguimiento, control e inspección de los contenidos televisivos. Y, en consecuencia, también se encarga de imponer sanciones en caso de que las cadenas vulneren la ley.