Ayer, en uno de esas apasionantes noticias/blogs de clickbait del medio del Conde de Godó, Grande de España no se cuántas veces, hablaban del problema que planteaba que en ciertos mercados el Google Pixel estuviera siendo un éxito, porque al resto de empresas del sector tecnológico que dependen de Google como partner de software para sus teléfonos, pueden ver a Google como una especie de competencia desleal si sus terminales empiezan a tener éxito.