Atreyub
En busca y captura
Respuesta: HARRY CALLAHAN
Pues bueno, ya me he quitado una espina:
- Harry, el sucio (Dirty Harry, Don Siegel, 1971)
La película que desde luego daría el empujón definitivo a Eastwood para convertirse, automáticamente, en un icono del género y un personaje en sí mismo deparando 4 entregas más. "Harry, el sucio" es una película seca, sin concesiones y sobre todo violenta. Callahan es un rudo policía que no duda en apretar el gatillo, sin preguntar, dejando la burocracia al margen (la escena en la que dispara contra los atracadores mientras aún mantiene el bocado de su bocadillo en la boca y encima disfruta con ello es toda una declaración de intenciones).
Lo que más me sorprende es la realización concisa y directa que tiene. Ya desde los primeros segundos Siegel nos pone en situación y somos testigos de las dos partes implicadas desde el mismo lugar de los hechos: las dos caras de la misma moneda. Los dos personajes odian y eliminan (cada uno a su manera y por distintos motivos), consiguiendo además uno de los mejores villanos del género. Siegel recurre a una cámara de pulso nervioso, activo y sobre todo muy ameno: escenas de acción muy bien resueltas y yendo al grano en todos y cada uno de sus apartados (el mejor momento: esa cámara alejándose de Harry / Scorpio en el campo donde la imaginación juega el resto ante la tortura que está punto de suceder), gracias a un guión que deja al margen cualquier tropiezo y propone un duelo entre el bien y el mal en una persecución de casi dos horas que no da ni un momento de respiro.
Y encima, para más inri, lo finalizan todo con un plano desolador donde nuestro protagonista prefiere evadirse y desaparecer (la cámara ayuda muchísimo a reafirmarlo). Ahora me queda descubrir si el regreso del personaje a la saga fue necesario o un recurso típico de sacar pasta de un icono.
Pues bueno, ya me he quitado una espina:
- Harry, el sucio (Dirty Harry, Don Siegel, 1971)
La película que desde luego daría el empujón definitivo a Eastwood para convertirse, automáticamente, en un icono del género y un personaje en sí mismo deparando 4 entregas más. "Harry, el sucio" es una película seca, sin concesiones y sobre todo violenta. Callahan es un rudo policía que no duda en apretar el gatillo, sin preguntar, dejando la burocracia al margen (la escena en la que dispara contra los atracadores mientras aún mantiene el bocado de su bocadillo en la boca y encima disfruta con ello es toda una declaración de intenciones).
Lo que más me sorprende es la realización concisa y directa que tiene. Ya desde los primeros segundos Siegel nos pone en situación y somos testigos de las dos partes implicadas desde el mismo lugar de los hechos: las dos caras de la misma moneda. Los dos personajes odian y eliminan (cada uno a su manera y por distintos motivos), consiguiendo además uno de los mejores villanos del género. Siegel recurre a una cámara de pulso nervioso, activo y sobre todo muy ameno: escenas de acción muy bien resueltas y yendo al grano en todos y cada uno de sus apartados (el mejor momento: esa cámara alejándose de Harry / Scorpio en el campo donde la imaginación juega el resto ante la tortura que está punto de suceder), gracias a un guión que deja al margen cualquier tropiezo y propone un duelo entre el bien y el mal en una persecución de casi dos horas que no da ni un momento de respiro.
Y encima, para más inri, lo finalizan todo con un plano desolador donde nuestro protagonista prefiere evadirse y desaparecer (la cámara ayuda muchísimo a reafirmarlo). Ahora me queda descubrir si el regreso del personaje a la saga fue necesario o un recurso típico de sacar pasta de un icono.
la escena del campo de beisbol inolvidable.