Estamos en una película en la que los personajes llevan trajes hechos de kevlar, ¿y lo que os sorprende es que no haya policías?
Para mí toda la saga es como un videojuego trasladado a la gran pantalla.
A lo que me recuerdan las escenas de acción, especialmente cuando los personajes se cargan a tropas de enemigos, es a cualquier Call of Duty, Gears of War, etc... Tanto por la lógica de las propias escenas como por cómo están rodadas. Incluso la "narración" -por llamarlo de algún modo- está planteada a base de submisiones en las que Wick va de A a B, a C, a D... Como si fuera todo un gran juego.
En esta cuarta entrega se marcan una escena entera en perspectiva zenital que también me recuerda a otros tipos de videojuegos, pero ya no los acoto a títulos concretos.
A esto se le debe añadir unas coreografías cuidadas, un look visual vistoso y cierta gracia a la hora de presentar a sus personajes. De hecho lo más potable de esta cuarta entrega son los secundarios: Donnie Yen, Hiroyuki Sanada y el negro. Pero claro, otros como McShane, Fishburne o Reddick (en paz descanse) parecen NPCs.
En conjunto, a mí personalmente me resultan cargantes. La primera todavía puede tener un pase porque todavía no se toma a si misma tan en serio. La segunda es algo más elegante, aunque tiene momentos sonrojantes (la escena en el centro comercial, o en una fuente en medio de una plaza... En fin). Pero la tercera ya es desproporcionada. Y esta cuarta parte todavía más.
Hay algo fundamental que me quita de todo, y es que simplemente no me creo a Keanu Reeves. Algo así de simple ya me supone una gran barrera. En la tercera puede contra los actores de The Raid, y por ahí ya no paso.
Pero por todo lo mencionado antes entiendo que se convierta en una saga de culto. Algo puramente generacional. Para los que el cine y los videojuegos son cosas como, no sé, intercambiables.
No sé si simplemente me parecen malas, o si soy yo que ya no conecto con este tipo de cosas. Pero me alegro para aquellos que sí lo hagan.