La La Land, la próxima película de Damien Chazelle (Whiplash)

Estoy de acuerdo (y me imagino que todo el mundo) en que los actores de La La Land no son tan virtuosos como aquellos de los musicales clásicos. Pero tampoco lo hacen mal y, lo que es más importante para mi, tampoco esto me invalida la película.
A mi me parece que es una película muy disfrutable y muy, muy, muy por encima de la media.
Algunos aspectos son más corrientes y otros más destacables, pero globalmente es una gran película.
Respeto que no guste el musical o que no guste algún número, cada cual tiene su gusto, pero leer que esta película es un bodrio me sorprende enormemente.

El otro día viendo Días de Cine hablaban del género y me pareció entender/insinuaban que en el musical se sublima la realidad para expresar sentimientos, emociones, experiencias mediante la música y el baile, utilizándolo como un recurso donde prima esa exteriorización de la vida interior frente a la veracidad de una narración realista.
En realidad esto no siempre es asi y hay musicales donde la historia es una mera excusa para ir metiendo números musicales a modo de exhibición de talento. En esos musicales siempre me han producido una sensación extraña.

Sin embargo en La La Land creo que los números musicales, como dice la crítica de Valentí, van mucho más en esa linea de expresión de emociones y quedan muy bien integrados en la historia. En cada número musical podemos comprender un poco mejor el estado de ánimo de los personajes, esperanzas, enamoramiento, melancolía. Creo que esta es la razón por la que es posible empatizar con ellos. La La Land es una historia llena de emociones que se visualizan por medio de los momentos musicales.

Creo que sería posible identificar una o dos emociones/sentimientos de los protagonistas en cada uno de los números musicales, contrastando o enfatizando la historia que está sucediendo en cada momento.
 
Me pasó algo parecido con The Man of Steel, me amargó un par de días.

La pequeña diferencia es que aquella peli es una puta mierda y La La Land es cojonuda.
 
La La Land es una historia llena de emociones que se visualizan por medio de los momentos musicales.

Creo que sería posible identificar una o dos emociones/sentimientos de los protagonistas en cada uno de los números musicales, contrastando o enfatizando la historia que está sucediendo en cada momento.

Y con rótulos de Primavera Verano Otoño Invierno por si no quedaba lo suficientemente claro.
 
Ahora sí que me has desmontado la película. No me había dado cuenta de ese detalle tan decisivo
 
Pues por fin la he visto y me uno al equipo de los que les ha gustado. Me parece que la película está tan bien dirigida y tiene una realización tan potente que todo lo demás me importa bastante poco, incluido ese guión bastante flojete. Yo he salido maravillado y deseando llevar a Emma Stone a comer algodón de azúcar a ferias albaceteñas......
 
Se ha quedado en el Pleistoceno ya. Dadle unos meses más hasta que Iñárritu haga su próxima animalada con dos planos secuencia falseados de Lubezki. Ahí ya ni Pleistoceno, olvido y vacío.

Sí. Esto es una provocación. Vivid con ello.
 
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No me ha encantado, pero tengo que respetarla por las intenciones y el curro que tiene.
 
Quizá no sería tan malo el que fuese una película fallida, como el hecho de que es un producto tan orquestado y arreglado para encandilar, tan diseñado de antemano que resulta una propuesta bastante falsa y en el fondo, a poco que se analice, floja. No me quejaré de la dirección, montaje y puesta en escena (excepto en los números musicales que ya comentaré), que es tan buena como en el fondo anodina. Ni de que sus protagonistas apenas sepan cantar y bailar; no me molesta puesto que es un peaje con el que se cuenta y numerosos films de este género han contado con actores que no saben desempeñarse bien con lo musical y acaba formando parte del trato sin más problema. Tengo graves problemas con precisamente las dos cuestiones que prácticamente todo el mundo alaba con entusiasmo, por lo que en consecuencia se me indigesta el supuesto “maravilloso” de la película.

En primer lugar los números musicales. Repito, nada que objetar a sus protagonistas (sorprendentemente está bastante mejor Gosling, un tipo que en líneas generales resulta bastante rígido en todo), que lo hacen bien dentro de sus limitaciones. Pero si en teoría se trata de un homenaje a los musicales clásicos, Chazelle no los ha entendido en absoluto. La forma de dirigir los números, suele ser de gran elegancia y contención; con una cámara apenas protagonista, que cede el espacio a los actores-bailarines. No suelen darse piruetas ni primar alardes visuales por encima del contexto musical. Para que nos entendamos, son los bailarines los que mueven la cámara y no al revés. Por tanto los números en sí me parecen artificiosos y buscando emociones enlatadas. Hace poco revisé Los paraguas de Cherburgo, esta sí una auténtica obra maestra, claro ejemplo de película que sigue al pie de la letra la dimensión visual de los códigos del cine clásico musical (para dinamitarlos después en un plano espiritual, aunque eso ya es otra historia).

La otra cuestión es el propio guión en su supuesta y bellísima historia de amor-desamor. Una vez más lo que debería fluir como una relación auténtica, amparada en la lógica interna de la propia película, es saltada completamente a la torera para imponer por decreto sentimental un final que convenga a la manipulación del espectador. Los personajes acaban separándose no porque lo pidan esos mismos personajes, que son completamente reacios a este hecho, sino porque lo que importa en el necesario plano del piano para poder ubicar un final lacrimógeno y melancólico terriblemente desleal a todo lo construido con anterioridad. Es la prueba más evidente de que se trata de una película construida con intenciones de epatar por encima de lo narrativo, por tanto más falsa que un euro de madera. Es decir no hay nada detrás de ella, sólo emociones fáciles construidas desde un guión tramposo. No creo que podamos hablar por tanto de una mala película, pero prefiero una película fallida y genuina, a una traidora y engañosa por muy bien construida que esté. Y desde luego calificarla de obra maestra es una falacia. Si ir más lejos Manchesten desde el mar o Moonlight me parecen infinitamente mejores que esta…
 
Yo incluso la tildaría de película acomplejada, efectivamente, no es capaz de confiar en sus números "per se" y los viste con virguerías con la cámara, no confía en una trama blanca basada en el amor y lo viste con supuestas ambigüedades que tienen costuras por todas partes. Yo ya dije que es algo muy verde.
 
Joer pero no pongas la peor, ésa solo mola en el reprise en el precioso dueto a lo Sondheim con Giles.
 
Fue la primera que se me ocurrió. ¡A mí me encanta! Pero tienes razón, la que citas es aun mejor. Todos los números son fantásticos.
 
A mí me entró el subidón cuando en el epílogo entran en el set y parece que va a empezar un número musical como dios manda.

Pero no, solo pasan de largo.
 
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