Ya cerré este tema y no he contado nada, entre otras cosas (tiempo, mudanza, trabajo...) porque quería probar a fondo antes de saber si era o no lo que estaba buscando... El caso es que al final no me he decidido por un estéreo y he pasado a una barra de sonido. Concretamente la Yamaha YHT-S401, que me costó 299 euros en Amazon Italia.
Nunca me habían gustado este tipo de aparatos, todos los que había probado no dejaban de ser un estéreo chillón y con graves borrosos, así que tenía claro que esto no era para mi. Pero me puse a leer sobre los modelos de Yamaha y me enamoré de un modelo de gama alta, que tenía casi dos mil euros de precio oficial y que podía conseguir por la mitad. Irresistible.
Pero claro, la jefa dijo que dormiría con el perro una temporada si se me ocurría gastar esa pasta en medio de los gastos de la mudanza, así que tuve que bajar mucho el listón, llegando al modelo que tengo ahora y su brutal oferta italiana.
Los análisis eran entre buenos y muy buenos, sin pegas importantes excepto el volumen de las voces, que lo criticaban por bajo. La recomendación de un ilustre forero (
@Macas ) terminó por hacerme con un trasto de estos.
Y la verdad es que estoy encantado. Es mucho mejor de lo que en un principio quería (un simple estéreo). Los graves son poderosos y creo que muy definidos para su precio. Los altavoces en si son pequeños y discretos, pero aún así aguantan un volumen exagerado sin distorsionar. El sonido es espectacular... Vamos, que mucho mejor que un estéreo para cine y juegos, sin ningún tipo de duda.
Evidentemente los traseros virtuales no tienen nada que ver con unos de verdad, pero jugando con los modos, la separación y esas cosas, se puede conseguir un resultado muy decente. Me recuerda al sonido envolvente que se puede conseguir con algunos televisores, pero muy muy potenciado. El central firme, la espacialidad frontal muy buena también. Lo malo es que los efectos traseros se oyen enlatados y con un ligero desfase, pero supongo que esa es la técnica que usan para crear el efecto. La verdad es que si no te fijas y te dejas llevar, da el pego de sobra. Vamos, otras personas que la han probado en casa flipan con el resultado.
Respecto a lo que dicen algunos análisis sobre el volumen de las voces, el arreglo es tan sencillo como subir dos puntos el volumen del central. Fin del problema.
Otra cosa que me encanta y que me ha sorprendido mucho es que aplica un excelente efecto envolvente si usamos los auriculares. Es acojonante lo que consigue con dos altavoces. Eso si, a costa de enlatar el sonido. Pero que te metes en la escena, te metes. Una lluvia o un tiroteo con los auriculares puestos es brutal. Muy contento con esto, ya que cada vez hago más uso de ellos.
No se que mas contar... El receptor es discreto (lo tengo dentro del mueble, detrás de una puerta corredera), la barra también. Con la puerta del mueble cerrada, ni te enteras de que está ahí. Por poner alguna pega, no tiene información en pantalla (en el televisor, quiero decir) y los cables que trae dan verdadera lástima. Los cambiaré cuando saque un rato.
En fin, que si alguien se ve en la misma situación que yo, que eche un vistazo a las barras estas. Yo por lo pronto estaré atento a lo que presenten los señores de Yamaha. Porque mi próximo sistema de sonido, será una barra. Y, si ahorro un poco, un proyector de sonido. Me he vuelto creyente.