Muy buenas a todos, amigotes.
Lo primero agradeceros el interés y la preocupación. Desde el principio quise escribiros pero me cuesta bastante todavía enfocar la vista en algún sitio que no sea justo frente a mí (por el collarín). Voy a intentar dictarle esto al móvil, a ver cómo queda.
Antes que nada, estoy bastante bien y progreso bastante rápido, así que leed esto sin drama.
A ver que os cuento.
@TheReeler preguntó que cómo podía haber sido el accidente. Pues como todos, incluyendo un despiste y dos o tres circunstancias. No recuerdo bien cómo fue (y no entiendo bien cómo pasó) pero se me ocurren pocas formas de que no haya sido culpa mía, aunque las hay. Cuando salga de aquí, vaya a la policía municipal y vea el atestado ya veremos a qué conclusión se llega.
Me empotré con la trasera de una Volkswagen Touran, calculo que a unos 27-30 km/h, rompí la luna trasera con la cara y caí detrás del coche. Afortunadamente llevaba casco (y con visera) y eso me salvó los ojos y toda la parte del cerebro. Los piños no tuvieron tanta suerte.
La media hora (aprox) después del accidente, entre que llegó la ambulancia del Samur y luego una UVI móvil a estabilizarme, fue una experiencia... digamos que... difícil de explicar sin contarla. Yo la defino como aterradora. Ya le dije a Magnolia en su día que El Semblante es básicamente unos dibujos animados de Peppa Pig al lado de aquel momento. Y no exagero nada.
La nariz y el maxilar se llevaron la peor parte, junto con las últimas vértebras cervicales. Afortunadamente mis problemas neurológicos han sido por inflamación de la médula debido a todo lo que se me descolocó en el accidente y estoy teniendo una recuperación bastante rápida, pero en esos momentos después del accidente de la cintura para abajo no podía mover nada y apenas tenía nada de sensibilidad. Las manos y los brazos sí podía moverlos, aunque las manos con bastante dificultad. Todo esto aparte del Cristo que tenía montado en la cara.
Cuando ingresé en la UCI lo primero que me hicieron fue operarme de maxilofacial para colocarme la nariz en su sitio, que según me han dicho venía como colgando de dos puntos aunque nadie ha sabido explicármelo bien, pero por lo visto era bastante impactante verme. También me colocaron un poco el maxilar (el hueso sobre el que se insertan los dientes superiores) que también me lo había fracturado.
El segundo día me mantuvieron sedado y me operaron de la columna, poniéndome placas o tornillos de titanio (no lo tengo claro, yo solo sé que ahora soy el puto Robocop
). Y luego ya desperté al tercer día según mandan los cánones.
En ese momento la doctora internista de la UCI me dijo que parecía que la operación había salido bien y que, a ver, que moviera el pie derecho. No sé si alguno habéis pasado por esto, pero es una sensación súper extraña y desconcertante. Tú te quedas mirando tu pie derecho y piensas: sé lo que me estás pidiendo pero no tengo ni puta idea de cómo hacerlo, miras el pie y no hay manera de que se mueva. Hasta que en un momento, sin saber cómo, de alguna manera consigues convencer a tu cuerpo y el pie se mueve un milímetro. Lo mismo pasó con el pie izquierdo, me dijeron que eso era muy buena señal y desde ahí decidí que no cabía el drama y que esto era cuestión de recuperarse. Ahí empecé a tomármelo de buen humor y a hacer bromas (incluso entubado, iba deletreando con el dedo lo que quería decirles) y hasta hoy.
Dos semanas más adelante tuve otra operación de maxilofacial que me dejó otra vez medio KO por la intensidad de todo lo que me tenían que hacer (esta gente maxilofacial no son de fiar, hacedme caso) y ya desde ahí a la semana me pasaron a planta y todo para arriba.
Ahora ya camino con muletas casi sin ayuda, me levanto y me acuesto yo solo, me hago prácticamente todo yo y las manos las tengo bastante ágiles, aunque tienen también camino por delante hasta estar al 100%.
El siguiente paso es que me trasladen a un centro de rehabilitación, al que también iré ingresado, que seguramente será el centro de rehabilitación de parapléjicos de Toledo. Para las visitas para familia y amigos es una mierda pero por lo visto es el mejor sitio para rehabilitación. Me han dicho que yo allí voy a ser el rey de lo bien que estoy ya, pero lo que me falta de rehabilitar va a ser más rápido allí.
En fin, que ha sido una aventura. Ha tenido cosas malas y buenas. Por ejemplo las tres semanas de UCI fueron una maravilla desde el punto de vista del trato humano, he salido de allí hasta con amigos. En el otro extremo está la dieta de mierda de purés fríos a la que me tiene sometido, que estoy esperando respuesta del Tribunal Penal Internacional porque estoy seguro de que esto encaja como crimen de lesa humanidad.
Por último deciros que no os preocupéis, que ese tocho ha sido circunstancial, todavía queda bastante hasta que me tengáis por aquí escribiendo tochos infumables.
¡Un abrazo a todos!