La visión convencional de lo que pasó ayer en Estados Unidos, cuando Trump perdió sus últimas opciones de quedarse en la Casa Blanca, es que al fin la pesadilla trumpista ha terminado y volvemos a la normalidad. Bueno, a la ‘nueva normalidad’.
Lamento disentir: ayer empezó todo, de verdad. Lo que llevó a Trump a la presidencia -que no, no del todo, al poder- no ha desaparecido mágicamente, sigue allí. Solo que ahora saben lo desamparados que están y cómo su querido sistema no funciona ya nunca en su favor.
Carlos Esteban / Rebelión en la Granja.
Lamento disentir: ayer empezó todo, de verdad. Lo que llevó a Trump a la presidencia -que no, no del todo, al poder- no ha desaparecido mágicamente, sigue allí. Solo que ahora saben lo desamparados que están y cómo su querido sistema no funciona ya nunca en su favor.
Carlos Esteban / Rebelión en la Granja.