La verdad es que la ultraderecha se puede ver favorecida, también por el poder altavoz que tiene EEUU cuya política interior y exterior siempre está dentro de los informativos y los periódicos. Es normal que muchos de estos grupos se quieran equiparar a Trump (si EEUU lo hace no debe ser tan malo).
No obstante, creo que es demasiado reduccionista considerar simplemente a Trump como ultraderecha. Entre otras cuestiones porque América es un universo propio a nivel político y judicial, influenciado obviamente por el mundo anglosajón, pero ya muy suyo. Con esto quiero decir, que es hasta cierto punto osado equiparar a Trump con algunas de nuestras fuerzas, más allá de algún análisis/rebuzno compartido.
Aquí en España, cierto personaje lamentable de Málaga que lo sigue intentando con un partido de Ultraderecha, busca equipararse y creerse el señor de Trump en España, pero muchas de las cosas de Trump entran en cortocircuito con su propio discurso homófobo, xenófobo, tradicionalista rancio y ultracatólico.