Buenas, compañeros. Tuve que llevar mi combo a reparar.
Me disponía a ver en agosto "Tiburón" en su primigenia edición en vhs como hago cada año, y hete aquí que me devolvía la cinta triturada. ¡Tiburón de videoclub, en perfecto estado, reventada por mi propio vídeo!
Hice varias pruebas con cintas desechables con los mismos resultados: a mi vídeo le pasaba algo. Total, después de vacaciones lo llevé a arreglar.
En principio me dijeron que era la correa seguramente, que sería fácil encontrar otra y reemplazarla. Pero al parecer hay otras piezas implicadas, algún motor o embrague, completamente irreemplazable e irreparable. Estoy esperando que me lo confirmen.
Con el dueño de la tienda estuve viendo vídeos de reemplazo por si acaso. En amazon, vídeos de gama media, de segunda mano y antiguos... ¡no bajan de 100 euros!
Está claro que en cash converters y similares se encuentran por mucho menos dinero, pero de nuevo, los vídeos que suelen verse por allí son de gama media, antiguos, usados. Pueden durarte diez años, o uno.
El hecho es que se dejaron de fabricar vídeos. ¡Ya no más! Solo hay los que quedan en este momento sobre el planeta, obviamente, degradándose y estropeándose poco a poco, o siendo acaparados por coleccionistas, por lo que su valor irá subiendo. Y los videos son piezas técnicas complejas, según qué se estropee, pueden no tener el menor arreglo.
Sabía que llegaría el momento en que el formato, obsoleto como está, desaparecía, pero francamente, ¡confiaba en que yo no lo vería! Coño, el Súper 8 es 20 o 30 aós más viejo y no solo sigue en pie, sino que siguen saliendo nuevas cámaras, emulsiones... es un formato todavía vivo y con una comunidad amplia e internacional detrás. Quizá sea eso lo que le faltó al VHS: una comunidad sólida que lo mantuviera vivo, no lo sé.
En cualquier caso, yendo a lo práctico, me encuentro con que tengo en mi casa una colección de 400 cintas de vídeo y que, llegará el día, quizás antes, quizás MUCHO ANTES de lo que yo creía, que ya no podré verlas. O podré hacerlo a un precio prohibitivo, que no podré ni querré pagar.
Mi solución ideal sería comprarme un vídeo antiguo, fabricado en los 80, mucho más mecánicos y reparables que los actuales, todo electrónica y piececitas de plástico. Y tener 2 o 3 vídeos baratos de repuesto. Pero, ¿hasta cuando aguantará el VHS?
Hay quienes aseguran que se volverá a poner de moda, como el vinilo y similares. Yo lo dudo.
Mi mayor deseo, desde luego, sería aprender lo suficiente para auto-reparar mis propios equipos, pero de nuevo, hay muy poca bibliografía al respecto, al menos en castellano, y mis conocimientos son mínimos. ¡Eso me causa una frustración! Coño, que son vídeos, no armas nucleares. ¡No puede ser tan difícil!
¿O sí?
Desde luego, si llega el día en que me encuentre sin vídeo con el que reproducir, o estando este a un precio impagable, tiraré mis cintas. No sacrificaré espacio para simplemente mirarlas, para eso me quedo con las carátulas, el resto a la basura. Ningún coleccionista o especulador pondrá sus manos sobre mi tesoro.
No me doy por vencido aún. Solo digo que el día en que no pueda reproducirlas, y comprar un vídeo sea misión imposible o demasiado caro, prefiero tirarlas y ocupar ese espacio en algo más provechoso. Pero por ahora, se quedan donde están. El tema es que, por lo que veo, ese momento está más cerca de lo que yo esperaba. 
vas a mi casa, abres cualquier cajón o armario, y tienes altas posibilidades de encontrarte pelis de vídeo.
