Si no lo digo, reviento.
Empecé a trabajar en 1998 en una empresa téxtil de mi pueblo, muy buena gente, buenos compañeros, aunque siempre te puedes encontrar a alguno gilipollas por el camino, pero al no estar siempre al lado de ese pues se le perdonaba. En general estaba de puta madre (perdonad la expresión). La buena racha se terminó a finales de 2005, cuando la faena escaseó y me largaron. Bien, perfecto, tuve tres meses de paro, hasta que encontré otro trabajo.
¡Cojonudo! me dije yo, y en febrero de 2006, a finales, entré en la empresa eléctrica del pueblo. El jefe y su hijo me dijeron que estaría muy bien, en el almacen entregando material a mis compañeros y tal. El sueldo mejor que en el anterior curro.
¿Dónde está el truco? Me decía yo por dentro. El jege ya me avisó, aunque no le dí mucha importancia en su momento. Tonto de mí, si lo llego a saber lo que sé a lo largo de estos siete años y pico ni me incorporo a la plantilla. Me dijo que el compañero con el que estaria, era algo, digamos especial. Aunque no empleó esta palabra. No lo recuerdo con exactitud.
Fuimos al sitio en questión. Por aquel entonces lo veía grande, al ser el primer día y tal. Me encontré con el individuo, ya me pareció con malas pulgas. Mi madre, la pobre mujer es un santa, que era su cara de siempre, perfecto. Empezamos los primeros días y ya empieza a ver pegas en mí. Coño, que acabo de empezar y uno no nace enseñado. Digo yo!. Qué va, que no.
Saltamos unos años y la cosa fuerte viene hace tres años y pico, cuando un día, creo que era por la tarde, a las tres y pico, de repente se pone y delante de los otros compañeros, que lo había hecho mal, cosas que ni siquiero recuerdo bien, pero me dejaron con tan mal cuerpo, peor que otras veces que se pasó conmigo (dos o tres veces tuve que quejarme al encargado nuestro que supervisa las faenas, pero poco podía hacer) y esta vez tiré la toalla. Fuí a mi encargado con la intención de contarle lo sucedido, pero lo que no pude contenar las lágrimas. ERa todo superior a mí. De verdad os lo digo. Un tipejo como este que se cre que porque lleva más de treinta años en el mismo sitio se cree con el poder de joder a los demás. En este caso a mí. Imtentaron poner freno. Lo cojnsiguieron un poco, pero el caso es que, a día de hoy, me levanto cada día con muy pocas ganas de ir a trabajar. Mis compañeros que lo coniocen, ya me dicen que pase de él, pero lo intento, pero no trabajo a gusto. Mis padres me lo dicen igual, que cambie el chip. Ya, muy fácil decirlo cuando no estás trabajando junto a el 8 HORAS al día. Joder, si es que cuando estoy más contento es cuando llega el mediodia y las 6 de la tarde ( hora de terminar en el trabajo. Y el fin de semana es algo que espero cada semana como el pan de cada día ). De verdad os lo digo, y perdón por el tocho, pero es que queria sincerarme. Si no hubiera el problema que hay en buscar un buen trabajo, me iria a otro sitio. Lo que jode es que una simple MIERDA de persona te desmotive durante 8 horas en el trabajo. Los demás son en general buena gente. Si hasta con algunos nos pasamos e-mails.
Y hasta aquí mi caso. El mediodía pasará rápido, la tarde no. Así es la vida que me está tocando vivir. Seguro que muchos dirán que soy un exagerado, pero no lo soy. Ojalá.
Empecé a trabajar en 1998 en una empresa téxtil de mi pueblo, muy buena gente, buenos compañeros, aunque siempre te puedes encontrar a alguno gilipollas por el camino, pero al no estar siempre al lado de ese pues se le perdonaba. En general estaba de puta madre (perdonad la expresión). La buena racha se terminó a finales de 2005, cuando la faena escaseó y me largaron. Bien, perfecto, tuve tres meses de paro, hasta que encontré otro trabajo.
¡Cojonudo! me dije yo, y en febrero de 2006, a finales, entré en la empresa eléctrica del pueblo. El jefe y su hijo me dijeron que estaría muy bien, en el almacen entregando material a mis compañeros y tal. El sueldo mejor que en el anterior curro.
¿Dónde está el truco? Me decía yo por dentro. El jege ya me avisó, aunque no le dí mucha importancia en su momento. Tonto de mí, si lo llego a saber lo que sé a lo largo de estos siete años y pico ni me incorporo a la plantilla. Me dijo que el compañero con el que estaria, era algo, digamos especial. Aunque no empleó esta palabra. No lo recuerdo con exactitud.
Fuimos al sitio en questión. Por aquel entonces lo veía grande, al ser el primer día y tal. Me encontré con el individuo, ya me pareció con malas pulgas. Mi madre, la pobre mujer es un santa, que era su cara de siempre, perfecto. Empezamos los primeros días y ya empieza a ver pegas en mí. Coño, que acabo de empezar y uno no nace enseñado. Digo yo!. Qué va, que no.
Saltamos unos años y la cosa fuerte viene hace tres años y pico, cuando un día, creo que era por la tarde, a las tres y pico, de repente se pone y delante de los otros compañeros, que lo había hecho mal, cosas que ni siquiero recuerdo bien, pero me dejaron con tan mal cuerpo, peor que otras veces que se pasó conmigo (dos o tres veces tuve que quejarme al encargado nuestro que supervisa las faenas, pero poco podía hacer) y esta vez tiré la toalla. Fuí a mi encargado con la intención de contarle lo sucedido, pero lo que no pude contenar las lágrimas. ERa todo superior a mí. De verdad os lo digo. Un tipejo como este que se cre que porque lleva más de treinta años en el mismo sitio se cree con el poder de joder a los demás. En este caso a mí. Imtentaron poner freno. Lo cojnsiguieron un poco, pero el caso es que, a día de hoy, me levanto cada día con muy pocas ganas de ir a trabajar. Mis compañeros que lo coniocen, ya me dicen que pase de él, pero lo intento, pero no trabajo a gusto. Mis padres me lo dicen igual, que cambie el chip. Ya, muy fácil decirlo cuando no estás trabajando junto a el 8 HORAS al día. Joder, si es que cuando estoy más contento es cuando llega el mediodia y las 6 de la tarde ( hora de terminar en el trabajo. Y el fin de semana es algo que espero cada semana como el pan de cada día ). De verdad os lo digo, y perdón por el tocho, pero es que queria sincerarme. Si no hubiera el problema que hay en buscar un buen trabajo, me iria a otro sitio. Lo que jode es que una simple MIERDA de persona te desmotive durante 8 horas en el trabajo. Los demás son en general buena gente. Si hasta con algunos nos pasamos e-mails.
Y hasta aquí mi caso. El mediodía pasará rápido, la tarde no. Así es la vida que me está tocando vivir. Seguro que muchos dirán que soy un exagerado, pero no lo soy. Ojalá.