La verdad es que, no llegará a la altura de la original ni de la segunda, aunque supera a la tercera, la del parque de atracciones, que tampoco era muy difícil. Intentan sacar esa nostalgia ochentera metiendo alguna canción aquí y allá. Eddie Murphy es y será siempre Axel Foley, un poli de la vieja escuela, de una época en la que todo se podía, una época que ya no volverá, esos grandes ochenta, pero que trata de traer sus métodos a nuestros tiempos con buenos resultados. Yo creo que rezuma esa mala baba que tenía la original con ese toque actual de situaciones cringe que intentas impedir, pero es que no puedes, recuperando a viejas glorias como son Judge Reinhold, Paul Reiser y John Ashton, con la incorporación de una generación nueva como Joseph Gordon-Levitt en la piel de un joven inspector de policia y Taylour Paige que interpreta a la hija de Axel. Muy fan service, meter también, a modo secundario-cameo, a Bronson Pinchot. El inolvidable Balki Bartokomus de la serie Primos Lejanos. Ahora me siento un viejuno. Y bueno, un gran secundario, para mí, es tener a Kevin Bacon que luce fantástico como la contraparte de nuestro Axel Foley que, a pesar de que ya no es un chaval y de que debería pensar en jubilarse, sabe sacarte algunos buenos y sorprendente momentos, con secuencias bastantes chulas. No voy a destripar nada, mejor que la veáis vosotros musmos, pero me ha gustado y debería haberse estrenado en cine. Mi nota final es de 8/10.