Desgraciadamente me he quedado sin ver Prisioneros, mi hermano solo ha podido conseguir entradas para El Quinto Poder. En fin, una película muy, muy irregular. Resulta infinitamente más interesante esta película cuando mira el caso Wikileaks desde la perspectiva de los medios o el Departamento de Estado de los EEUU que cuando acudimos a la cabeza loca de Assange. Sí, es cierto. Lo deja a la altura del betún, pero al mismo tiempo la película deja un frente abierto para que creas lo que quieras creer.
Pero muy irregular en su conjunto, se pierde en moderneces y en gilipolleces como metáforas innecesarias para mostrarnos una película que en su conjunto ya hemos visto alguna vez.