"Trance": lo nuevo de Danny Boyle

que tenga lo de abajo depilado es "plot point", como dicen. Esto son los desnudos QUE EXIGE EL GUION! :palmas:garrulo

la peli es muy entretenida y vistosa, en ese estilo colorista y algo estridente de Boyle, que aqui va parejo al juego de realidad/ficcion de toda la peli. Guion de thriller de esos de dar giros y giros y que al final te quedas pensando "me han contao algo? no se".

bien.

ah, bueno... y ellos dos enseñan culo.
 
Entretenida es un rato porque te tiene ahí con el intringulis de qué demonios está contando y cómo se va a resolver este puzzle. Pero te deja con ganas de revisionar para saber si todo cuadra más o menos bien, o por el contrario es una de esas pelis tramposas-efectistas en su resolución. De momento, me quedo con la primera impresión.

Y Rosario los trae locos, cómo no... :palmas
 
FA:

"Más un ejercicio conceptual que cine negro convencional, 'Trance' demuestra la determinación de Boyle de continuar superando retos cinematográficos aparentemente imposibles (...) Con todos sus trucos, la película se presenta como una sexy distracción" Peter Debruge: Variety

"Danny Boyle evidentemente se divierte añadiendo giros y curvas y túneles y un infinito estilo a su moderno noir londinense 'Trance', pero con tantos giros la película acaba por retorcerse en lugar de ir a alguna parte" Todd McCarthy: The Hollywood Reporter

"Este estimulante trabalenguas es una delicia visual, auditiva e intelectual (...) Es lo que pasa cuando el cine noir se va de juerga (...) Puntuación: ***1/2 (sobre 4)" Kyle Smith: New York Post

"Un tortuoso juego para la mente, 'Trance' es también la película más divertida e inteligente en lo que va de año" Richard Corliss: Time

"Dawson profundiza y clava todos los matices, haciendo que el vertiginoso suspense resuene con una cruda emoción. Ella es, en una palabra, electrizante (...) Puntuación: *** (sobre 4)" Peter Travers: Rolling Stone

"Durante un rato, 'Trance' me tuvo haciéndome pensar, y más o menos enganchado. Pero luego la violencia, los temas, las traiciones y los enredos entre fantasía y realidad se hicieron aburridos (...) Puntuación: **1/2 (sobre 4)" Michael Phillips: Chicago Tribune

"El thriller psicológico del visionario cineasta teje un tapiz muy complicado (...) Puntuación: **1/2 (sobre 4)" Claudia Puig: USA Today

"'Trance' principalmente resulta como un escaparate para el brío [de Boyle], un espíritu que anima todas sus elecciones, visuales y de otros tipos" Manohla Dargis: The New York Times

"Un efectista desmontaje hipnótico del codificado género del robo (o atraco) perfecto. (...) un juego de ingeniosos trampantojos que puede seducir mientras avanza, imparable, hacia su desenlace, pero que no resiste ni dos minutos de reflexión." Jordi Costa: Diario El País

"Sometido a los cambios de rumbo de un guión imposible, (...) el público puede perder la paciencia. (...) Cuando una película necesita media hora para explicarse a sí misma es que se ha perdido en sus propios atajos" Sergi Sánchez: Diario La Razón

"Es tan bueno el arranque que casi te dan ganas de frotarte las manos (...) el «problema» está en la frenada de Danny Boyle (...) Aunque 'Trance' deja el poso de un cine singular, imprevisible, hipnótico (...) Puntuación: *** (sobre 5)" E. Rodríguez Marchante: Diario ABC

"Fusión fría de thriller laberíntico de manual con playback de Hitchcock ejecutado por un chulazo trajeado con DJ de fondo, es muy consecuente con el estilo de su director (...) Puntuación: *** (sobre 5)" Antonio Trashorras: Fotogramas

"95 minutos de sofisticado psicoanálisis, de exquisita manipulación (...) Puntuación: **** (sobre 5)" Mariló García: Cinemanía
 
Joder, a mi lo de Rosario me ha dejado en shock. Tanto que ni me acuerdo de la pelicula ya.

El Boyle la saca asi en la pelicula y encima se la tira durante meses? Vamos a tener que reconsiderar a este tio.
 
La pelicula en otras manos podría haber sido un thriller erótico noventero con ecos a ORIGEN la mar de chulo.

Lo que queda es una pelicula tan abrumadora, confusa y barroca como las que suele hacer Boyle, con buena foto, planos chulis y cierta clase, pero mal contada, con personajes sin alma, hueca. Levanta el vuelo a partir de una revelación en su tercer acto y a partir de ahí vemos las mejores escenas, entendemos cosas, los personajes cogen entidad. Pero estamos ya en tiempo añadido y...

desaprovecha todo el arranque del robo, desaprovecha todo el rollo onírico, desaprovecha a Casell y desaprovecha a Rosario Dawson, con un personaje desdibujado que estaba destinado a quedar en el recuerdo y sólo lo hace realmente por dos planos (breves) con desnudo integral que son gloria bendita.

No es despreciable, está parcialmente lograda, se hace corta y en general es una propuesta moderadamente atractiva. Pero Boyle cada vez es más cargante y aqui sí tenia chicha para hacer algo bueno de verdad.
 
lo de no sea un "thriller erotico noventero" lo dices como...¿halago?

yo creo que es en el tercer acto donde se pierde.
 
lo de no sea un "thriller erotico noventero" lo dices como...¿halago?

yo creo que es en el tercer acto donde se pierde.

Sin duda. Me hubiera gustado con un rollo más convencional. INSTINTO BÁSICO, LA ULTIMA SEDUCCIÓN, ANALISIS FINAL, este rollo.

para mi la pelicula coge interés cuando la Dawson explica su noviazgo con el McAvoy y su hipnosis para alejarlo de ella, creo que son las mejores escenas... toda esa parte como corto OLVIDATE DE MI meets TE DOY MIS OJOS hubiera molado...
Todo lo anterior es una pelicula que no termina de arrancar
 
Para mi es un thriller psicológico. El componente erótico no lo veo, pese a que haya algo de tensión sexual o intereses sexuales sueltos por ahí. Creo que ha sido ver a Rosario en todo su esplendor y te ha dado un cortocircuito.

Boyle tenía un buen material entre manos y creo que ha sabido defenderlo bien manteniendo su personalidad (un poco retorcido, surrealista, confuso) pero sin castigar más de lo necesario al espectador para que pueda ir de A a C pasando por B en lugar de montarle un DIY (arréglatelas como puedas).

Si bien la película echa un pulso al espectador por su narrativa caprichosa, afortunadamente consigue ir resolviendo los hitos argumentales que se van presentando de forma satisfactoria por lo que la sensación de confusión o perplejidad no es constante. Y, como ya has dicho, Boyle también se saca de la manga varios momentos visualmente muy interesantes.

Como mínimo le debo a Trance reconocerle el mérito de ser un thriller con personalidad sin morir en el intento: la intriga me funciona, el juego narrativo y audiovisual me funciona y no le puedo pedir más a unos personajes que no pretenden ser empáticos, que caminan sobre el filo y que se deben más a lo psicótico que a lo dramático.
 
Absolutamente DELIRANTE y entretenidísima a más no poder. Si entras en su juego de excesos (visuales y argumentales) y te dejas llevar por Boyle, alias el Dj de las texturas posmodernas, se disfruta al máximo. Me ha mantenido intrigado en todo momento por su planteamiento de heist movie virada en compendio de loquísimos giros (sin miedo a caer al vacío), su propuesta visual (y sonora) destinada a estimular lo sensorial y su perverso manejo de los personajes, cuyo enfoque va variando en una sublimación de que nada es lo que parece, y así las simpatías del espectador van cambiando hasta caer en la cuenta de que nadie esta inmaculado, sino más bien al contrario.

Por otro lado, leo por ahí que se habla de confusión, de que no se acaba de entender, lo cual me sorprende teniendo en cuenta que la película llega a explicarse a sí misma. No me parece especialmente difícil de seguir, vamos. Y respecto a que se le va de las manos en un más difícil todavía demasiado inverosímil, pues, oiga, es que a mí me parece una de las gracias de la película: su descaro, su desparpajo, su falta de complejos le permiten regodearse y rebozarse en el caos y el delirio hasta extremos muy divertidos y hasta coñeros (nunca mejor dicho). Se exprime a sí misma hasta lo imposible, y esa falta de vergüenza me gana en el panorama cinematográfico actual, plagado de peliculitas adocenadas, "correctas", temerosas de lanzarse a la piscina... aunque al final se ahoguen. Boyle, en cambio, juega sin rubor, retorciendo las reglas a su conveniencia, si bien su atrevimiento le generará múltiples críticas. Pero, en todo caso, yo agradezco estos demenciales divertimentos que estiran el género hasta el territorio, incluso, del fantástico. Productos que se presentan con un embudo en la cabeza.

Se olvidará pronto, pero el rato ha merecido la pena.

PD: Peli muy PANMETRONIANA (¡espero crítica destroyer!).
 
Para mi es un thriller psicológico. El componente erótico no lo veo, pese a que haya algo de tensión sexual o intereses sexuales sueltos por ahí. Creo que ha sido ver a Rosario en todo su esplendor y te ha dado un cortocircuito.

Si, si! Creo que me he explicado mal. Claro que es un thriller psicológico, sólo digo que me hubiera gustado más con un enfoque de intriga erótica, haciendo más hincapié en las relaciones entre personajes, en el triangulo amoroso, dandole un toque más sensual, sacando máximo partido al personaje femenino (por dios, ese mcguffin lo pone a huevo!), juntando su poderío hipnotizador con el más puramente sexual... Imaginate esto en los 90, Joe Eszterhas en el guión, Brian De Palma dirigiendo y Monica Bellucci de prota femenina (todo cuadra, por cierto):fiu

Me interesa menos su componente oniríco y el rollo artificioso de Boyle, la verdad.

Aun asi, es una pelicula entretenidísima, vistosa (brutal esos planos de autopista de colores) y con ideas fabulosas. Sólo que me parece que no acaba de cuajar y que tenía potencial para ser, quizás en otras manos, algo realmente memorable. En cualquiera de los casos, le haré una revisión, que en este caso se me antoja necesaria. :beso
 
es que hay un riesgo en
convertir a "el bueno" en "malo" y al "malo" en "el bueno",
(con todos los matices que querais), y creo que el espectador se cortocircuita un poco. Aparte de esas explicaciones un poco locas pero tan serias.
 
Las explicaciones locas "parecen" relativamente serias, Elliott, pero a mí me parece que Boyle, en realidad, le resta seriedad dado que apuesta claramente por unos excesos que te los tienes que tomar a coña: los toques gore, el asunto depilación (WTF) o el mismo final over the top son de llevar un embudo en la cabeza, eh. Este guión en manos de un De Palma gamberrete daría lugar a algo indescriptible. Yo pienso que, más que adónde te lleva, lo valioso de la película es el propio viaje, y así la trama avanza imparable, imponiéndose a reflexiones pausadas o claves verosímiles. Ya estás subido en un tren a toda velocidad y no te puedes apear.
 
Lúdico ejercicio de estilo de Danny Boyle que reinterpreta un género para amoldarlo a su particular estilo, un festival audiovisual con un excelente acabado y un indudable buen gusto para el encuadre y elección musical


Trance es en cierto modo, un regeso ( o regresión ) a ciertos modos que ya se había olvidado en su cine:

- la voz en off plural , que aquí adquiere una justificación mayor por la hipnosis, pero que ya utilizó en Trainspotting

- el triángulo como epicentro de las relaciones entre personajes, abandonado en 127 horas

- el materialismo como motor y trauma desencadenante

- el regreso como guionista de John Hodge, con el que hizo su primera trilogía británica




Es precisamente este último factor el que creo que ha jugado mas a favor de Trance, pues se aprecia un mayor rigor en el armazón de la historia, y sobre todo , en la lógica de la evolución de sus personajes, que en títulos como Sunshine se le escapaba a su director por los cuatro costados, quedando siempre en una locura apocalypsenowítica mal digerida ( y admitida por el propio Boyle ) que aún así, está a punto de bordearlo con el clímax final, por suerte no dura mucho.



Se nota no obstante que Danny es un moderno de pura cepa: le encanta el collage de texturas que le permiten las nuevas tecnologías, y no duda en insertarnos todos los gadgets presentes en la actualidad, desde tablets a smart tv´s, usandolo con tino para reflejar el caos mental de la psique de Simon.


Es ese discurso que se desprende de fondo, el de la desestructuración impuesta por un acoso y derribo de imágenes de todo tipo, el que suscita el mayor interés del film. La cosmología visual que nos acompaña y ha sustituido , ocultado o perturbado nuestra percepción sensorial, la misma que lleva a su protagonista hacia el crimen, la fascinación por lo prohibido, las cuitas de la obsesión por poseer algo que no tiene dueño porque es una ilusión , ya sea una obra de arte o una persona.

Magnífico resulta el final, donde uno de los personajes duda entre el olvido y el recuerdo, como si se tratase de liberar un disco duro interno para grabar nuevas experiencias o elegir lo que ya tienes guardado ( no en vano la elección se ejecuta a través de una tablet )

Por lo demás, da gusto ver cómo el británico no se ha amoldado en absoluto a las exigencias de Hollywood, rodando un film que destila una sexualidad frontal y natural, ausente en los blockbusters actuales, así como un arrojo admirable para la imaginería morbosa y gore.
 
Última edición:
Es ese discurso que se desprende de fondo, el de la desestructuración impuesta por un acoso y derribo de imágenes de todo tipo, el que suscita el mayor interés del film. La cosmología visual que nos acompaña y ha sustituido , ocultado o perturbado nuestra percepción sensorial, la misma que lleva a su protagonista hacia el crimen, la fascinación por lo prohibido, las cuitas de la obsesión por poseer algo que no tiene dueño porque es una ilusión , ya sea una obra de arte o una persona.

Nogui, mandanos el curriculum a la redacción de CAIMAN, que lo recibiremos con los brazos abiertos.
 
Si lo he entendido bien ( :sudor ), nogales viene a decir que el juego de texturas, el bombardeo de imágenes o el uso de dispositivos tecnológicos vienen a estar conectados de alguna manera con el desequilibrio del personaje, cuya percepción sensorial está "nublada" y esto le impulsa a tener un comportamiento lunático... ¿Va por ahí la cosa?

Hombre, se puede pensar que el "loco" aspecto formal de la propia película está unido al personaje, pero no sé... Yo creo, simplemente, que a Boyle le gusta mezclar, remezclar y experimentar con lo visual con el fin de crear una emoción sensorial en el espectador. La trama y los personajes me parecen, más que nada, un vehículo para que el envoltorio sea el que brille por encima de todo, y así tiene la oportunidad de hacer planos molones como el de esas carreteras en rojo que semejan arterias... Lo que pasa es que aquí la historia te engancha porque al principio te genera una incertidumbre y luego te va dando giros y giros hasta alcanzar puntos de tal exceso que llegan a lo bizarro. Y esta chaladura tiene su encanto. Como dije en un post anterior, no creo que Boyle y el guionista se tomen del todo en serio este material que renuncia a cualquier mesura o verosimilitud.
 
Meanwhile in Russia...

07-russian-girl.jpg
 
Enésima variación sobre el thriller de robos, en esta ocasión un ladrón que tras robar una obra de arte (y a causa de un golpe) olvida donde se encuentra escondida la pieza y debe utilizar la ayuda de una psicóloga que utiliza la hipnosis como terapia. El film tiene un muy buen planteamiento y se puede llegar a seguir con cierto interés si el espectador sigue el juego delirante al guionista Joe Aeharne y a un Danny Boyle tan obsesionado en epatar con su constante juego con recursos visuales, lleno de trampas, falsos sospechosos y verdades reveladas que se muestran ante el espectador como muñecas rusas...Algo así como una versión postmoderna del thriller tramposo, muy bien interpretada por James McAvoy, Vincent Cassel y Rosario Dawson, el problema es que aunque formalmente notable, incluso entretenido en su conjunto, el fondo del film y su estructura son bastante convencionales, no permitiendo un análisis muy elaborado fuera del malabarismo -brillante, pero algo vacío- al que acabamos de asistir
 
Nuevo ejercicio de griterío visual de Boyle, con la misma excusa de siempre (ninguna). El film es un tour de force depalmesco donde casi la mitad de su metraje sucede en la mente de su protagonista, lo que conlleva más vueltas que el Guadiana en torno a redefinir a sus personajes y sus motivaciones. Basicamente dividirlos en buenos y malos, no hay mayor profundidad en ellos, y aunque entretiene al final sales con la sensación de vacío absoluto. Aparte de DePalma, me ha venido a la cabeza -al menos en ese juego de estratificación mental, espacios diferenciados dentro de la psique-, Olvídate de mi. Y claro, la diferencia es abismal.
 
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