Cazafantasmas: Más allá (2021) by Jason Reitman

Te garantizo que esos dos no fueron los que limpiaron todo ese desastre, porque si no la sensualidad se iba a tomar por culo rapido.
 
Venga va:

A ver, ¿es la peli que nos merecemos?, NO joder, no lo es.

La peli que nos merecemos habría sido una tercera parte pura y dura, con todos ellos en Nueva York (siempre un personaje mas) y si acaso con la Weaver y la secretaria reconvertidas en cazafantasmas para la causa, con Rick Moranis por ahí encerrado en un manicomio por los hechos vividos en las dos partes anteriores, no a Paul Rudd corriendo de un sitio a otro sin saber muy bien qué hacer. Pero el cabrón de Murray no hacía mas que triturar los guiones que le mandaban y devolverselos a Reitman, "Nadie quiere ver a unos viejos corriendo por ahí persiguiendo fantasmas".

Ideas como que el personaje de Murray fuera un fantasma en la tercera, o que fuera alcalde de Nueva York, o incluso que simplemente ni apareciera como dijo Aykroyd "La tercera se hará con Murray o sin él".

Y al final si que la hicieron, pero la versión femenina, y con cameos de Murray, Aykroyd, Weaver,... ¿era cazafantasmas 3?, no, qué cojones, era la versión estrogenada de aquella. Y ojo que no era desagradable eh?, fue bastante graciosa, pero si no se hacía algo que conectara directamente con las dos anteriores la propiedad intelectual se iba a ir a tomar por el culo. Y es ahí donde entra el hijo de Reitman para proponer algo mas barato, y "familiar", con el elenco implicado aunque sea poquito.

Todos los que conocemos la historia de Murray y Ramis veiamos imposible un reencuentro, y mas cuando el segundo murió.

Pero bueno, hecha esta pequeña introducción voy a meterle caña al tema:

Un prologo cojonudo, la verdad, con esas sombras jugando al despiste y con guiño al sillón de la primera parte y también con cierta tristeza por mi parte

Está claro quién es ese personaje que intenta atraer a Gosher, y para un tio que ha crecido viendo a los cazafantasmas y flipando con ellos es triste ver cómo uno solo de ellos se está enfrentando a esa mierda él solo.

Luego viene el supuesto relevo generacional: El chaval de Stranger Things, que ya no puede hacer estos papeles de niño, joder, es que ha crecido de la hostia, pero imagino que sería este o Tom Holland, el chaval asiatico como contrapunto graciosillo pero sin gracia, la chica negra que da un poco igual y (la unica salvable) la niña de las gafas, que parece una reversión de la secretaria de la primera, pero con un par de cojones.

El personaje que mas gracia me ha hecho con diferencia ha sido el de JK Simmons (jejeje)

Los adultos: una chica genérica rubia y Paul Rudd que imagino que nos representa un poco a todos esos que crecimos con los cazafantasmas, solo que nunca ha tenido carisma, y mucho menos el carisma de Moranis (le menciono porque parece que este personaje quiere ser una extensión de aquél).

La trama muy normalita, pero coño, ver el ECTO-1 a toda hostia con una puesta de sol, corriendo detrás del "mascahierro" (que imagino sustituye al moquete), es algo que me ha hecho sonreir.

Referencias a las peliculas originales por ahí escondidas ¿A quién vas a llamar?, "Menudo bizcochito" y un climax en el que todo lo que llevamos esperando durante toda la película viene cogido por los pelos, pero JODER, es que mola mucho!

Volver a verles juntos, aunque no tenga sentido dentro de la película (coño, al menos haber puesto una secuencia en la tienda de Aykroyd en la que él esté viendo la tele y se vea lo que está pasando en aquel pueblo), pero se lo perdono, porque verles juntos, realmente JUNTOS a los 4... uffff. De hecho, y aunque sea un guión bastante genérico, y el final lo veas venir por todas partes os garantizo que en el momento "Afterlife" cuando aparece Eagon un servidor ha llorado como un niño, y mi mujer también.

Y es en ese momento, cuando el "afterlife" del titulo de la película cobra todo su signficado te das cuenta de que esto es un guiño, una sonrisa, un abrazo y un "gracias por acordarte de nosotros joder".

No es la película que nos merecíamos, pero sí la mejor que podemos tener.
Suscribo cada palabra.

Me esperaba más, pero ese final también me ha emocionado aunque se hace corto. El cine aplaudiendo como hacía años ese momento. Fue bonito.

Se nota que está hecha con cariño y respeto a Harold y a la original. Con sus fallos, pero digna secuela. Quizás mejore con la revisión ahora que ya se que va a pasar.

Gran crítica @Cassiddy, me he sentido muy identificado.
 
Suscribo cada palabra.

Me esperaba más, pero ese final también me ha emocionado aunque se hace corto. El cine aplaudiendo como hacía años ese momento. Fue bonito.

Se nota que está hecha con cariño y respeto a Harold y a la original. Con sus fallos, pero digna secuela. Quizás mejore con la revisión ahora que ya se que va a pasar.

Gran crítica @Cassiddy, me he sentido muy identificado.


Gracias hombre.
 
Película concebida como un gran masturbador que ofrece poco a poco guiños y detalles de la peli original a un espectador que se va poniendo cada vez más palote (el logo del coche destapado y la luz que justo se apaga, que es un “todavía no, tened paciencia” en toda regla) hasta culminar en un gran clímax de nostalgia pornográfica, reuniendo al reparto viejuno en su última actuación en un festín de emotividad que va a por la lagrimita sin hacer prisioneros. Como tal, está todo bastante bien ideado, de manera coherente aunque impersonal, pero también es un poco lo que debió de haber sido la nueva trilogía de SW y no fue, quizá porque esto es mucho más intrascendente y sencillo, sin tanta expectativa ni afán por estirarlo todo.

El objetivo, conciliar la pura maniobra comercial, atrayendo al público de toda la vida y siendo algo totalmente deudor de lo ya visto (hasta el villano-villana es el mismo)… con captar también a la chiquillada y a los hijos de este público mediante un producto lo bastante autosuficiente para quienes vengan de nuevas, por mucho que lo primero sea la auténtica razón de ser y lo que tanta gente lleva demandando desde hace tiempo contra las palabras de Bill Murray; el cliente es quien tiene siempre la razón, y si lo que la peña quería era esto, pues bienvenido sea frente a la anterior, que más bien intentaba repetir la premisa desde cero pero sin ese factor sentimental que en el fondo es lo que la sostiene.

Millonésima explotación del legado spielbergiano y ochentero de las aventurillas juveniles, tan retro y tan encantadoramente falso como ese restaurante de comida rápida temático de los años 50 (y eso que los 80 ya tenían una buena parte de evocación de otro tiempo), no se olvida de la temática padres-hijos, de los conflictos paternofiliales sin resolver ni del progenitor ausente, con unos adultos que siguen siendo niños (esto sí que es muy actual) y el Rudd como encarnación de ese fan viejuno que no sabe comunicarse con las nuevas generaciones, quienes a su vez redescubren ese legado polvoriento, estigmatizado o incluso prostituido (la comercialización posterior, la extinción de lo maravilloso...). Son los años dorados de Reagan esos bichillos de gominola liándola parda en el establecimiento perfectamente gris y ordenado de nuestra rutina de treintañeros y cuarentones. La niña protagonista se pasa un poco de repelente y la escena postcréditos ya sí que está totalmente de más y rendida al guiñito (por cierto, el de “a quién vas a llamar” es superchorra). La trama va un poco dilatada para lo que es, con alguna secuencia de acción espectacular bien tirada, pero con un grupito que tarda en conformarse, entre detalles de “american gothic” de ese, misterios locales, el cacique del pueblo… mas chistes zoomers, multirracialidad y el lado intrépido y divertido de la ciencia felizmente reconciliado con las creencias magufas tan de la actualidad.

Muy bien el tal Finn, un firme candidato a apetecible twink judío y ambivalente de moda (cuidado, Chalamet). Muy mal, como siempre, lo de esos pretendidos adolescentes interpretados por actores que en la vida real son más mayores, ofreciendo una imagen un tanto distorsionada de estas edades; nos hacen sentirnos como putos degenerados porque nos ponen cachondos unos supuestos críos que en realidad tienen la edad legal o incluso uno o dos años extra de propina.
 
esta bien la primera mitad, cuando no se dedica a copiar (hasta planos) y referenciar TODO lo de la anterior (que tampoco era gran cosa mas alla de la nostalgia), que es lo que pasa en la segunda mitad

el final es bonito pero esta taaaan estirado buscando la lagrima.... y ellos acaban dando un poco de pena

escenas pos credits bobas
 
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CAZAFANTASMAS: MÁS ALLÁ (Ghostbuters, Afterlife, 2021 - Jason Reitman)​



Entretenido reboot y homenaje al film original, especialmente entonado en su primera mitad (cuando se muestra más diferente y fresca) y que opta por utilizar una estética más añeja, como en la televisiva Stranger Things, que la habitual en los ruidosos blockbusters actuales -la música de Rob Simonsen es un magnífico homenaje a Elmer Bernstein- la pena es que la segunda parte del film pierde interés en favor de un exceso de nostalgia y un remendo simpático del film original...No por ello resta un entretenimiento digno, en el que sigue la idea de cambiar algunas cosas...Para que todo siga igual, algo superficial, pero siempre digno, que hará las delicias del espectador original y el recién llegado
 
Entretenida, me esperaba algo mucho peor. Me ha gustado mucho la banda sonora, le he encontrado un rollo muy épico entre Silvestri y Williams (perdonadme, por favor). Joer con la niña andrógina, sabe más que un premio Nobel de física la tía.

Una cosa que me ha llamado la atención es

la anticlimática aparición de los cazafantasmas originales, igual que en la peli de Spider-man con Garfield y Maguire. O sea, usan la baza de la nostalgia pura con los intérpretes originales pero la aparición es un poco descafeinada (para mi gusto). Llegan ahí, no se sabe cómo, y ya. Supongo que desde que vi Infinity War nada podrá superar la entrada de Thor en Wakanda :juas

Por otro lado bien el CGI de Harold Ramis, bastante convincente. Bonito homenaje.

Para pasar un buen rato, aunque mañana ni te acuerdes de qué has visto.
 
Para mi la BSO representa lo peor que se puede hacer en una continuación que es saquear totalmente la original, deslocalizar el propósito original y además ningunear con un miserable crédito insulso a Elmer Bernstein.
 
Pues teniendo en cuenta todos los refritos y reboots que últimamente están haciendo de todo… esta es la que sale mejor parada, y sin ser nada del otro mundo.
 
Eh, que John Tones dice que si no te gustó es que eres machista o algo así.
 
John Tones es otro progre gilipollas de los que tanto abundan en la crítica cultural de nuestros dias. No hay uno que se salve, son como una secta.
 
A ver mala no es pero ya cansa un poquito los personajes que de buenas a primeras saben de todo y las secuencias con personajes explicándote mogollón de información en dos minutos y encima en una conversación telefónica con una desconocida.
Lo de abusar de los homenajes ya si eso lo hablamos otro día...es un gigantesco fan service no mal hecho pero un fan service al fin y al cabo.
No se han currado ni un antagonista nuevo joder ya hay que ser perezosos...
 
Pse, payasada sin gracia, con el hijo neocon de Ivan Reitman (ese que hacía comedias de tetas y culos a principios de los 80) convirtiendo lo que era una comedia neoyorkina de humor más o menos gamberro en un sucedáneo del universo Amblin, vaya usted a saber por qué motivo. Hasta tienen los santoso cojones de reinterpretar la excelente BSO de Elmer Bernstein para el film de 1984 en un estilo Williams, supongo que para tratar de bajar las defensas nostálgicas del espectador que buscaba algo más de las gracietas de Murray y compañía, y que eran el alma del film original. En cambio, ese tipo de humor aquí únicamente lo vislumbramos como un simple gag puntual, una isla enmedio de un océano de babas (y no de las de Moquete precisamente) marca de la casa.

En fin, salvo por el brevísimo retorno de los personajes originales, casi que prefiero el reboot de Paul Feig a esto.

Un saludete.
 
Cazafantasmas: Más Allá

¡Que agradable sorpresa!, reconozco que ni en mis mejores sueños me imaginaba una película tan buena. A diferencia con el mojón de 2016, aquí estamos ante un film que rezuma personalidad propia y al mismo tiempo respeto y sobre todo cariño, mucho cariño por la saga original. En lugar de tirar por el camino fácil y hacer un nuevo reboot, en esta ocasión optaron por hacer una secuela, que al mismo tiempo sirve para presentar a nuevos personajes, los cuales tomarán las riendas de sus antecesores.

Nada de esto era sencillo, pues desgraciadamente uno de los Cazafantasmas originales falleció en 2014, lo que evidentemente añadía al proyecto un plus de dificultad más que evidente. Sin embargo, Jason Reitman se las ha ingeniado para marcarse una historia que rinde homenaje (¡y que homenaje!) al gran Harold Ramis y con un tratamiento de guión respetuoso con el enfoque del que siempre ha hecho gala la saga: humor y fantasía, con toques de terror. Los nuevos personajes caen bien, tienen chispa (unos más que otros evidentemente), pero todos resultan agradables y es fácil empatizar con ellos. El final del film es épica en estado puro, tanto a nivel visual como emocional. La película está repleta de referencias a las dos primeros films.

En lo concerniente al reparto, de entre los infantes destacaría el maravilloso trabajo de Mckenna Grace y Logan Kim. Por parte de los adultos me ha encantado el personaje de Paul Rudd y de la actriz que da vida a la madre de los chicos. Mención especial para las
apariciones del reparto original, todos con unos cameos cojonudos y no como la mierda que hicieron en el film de 2016. Aquí tenemos a Aykroyd/Murray/Hudson retomando sus personajes y haciendo aquello que mejor saben hacer: ¡cazar fantasmas! La reaparición en escena del legendario equipo, ha sido un momento precioso, espectacular y con un cierre digno para unos personajes memorables. A parte de la participación de los Cazafantasmas originales, también me ha gustado mucho como han traído de vuelta a Annie Potts y Sigourney Weaver. Es una pena que Rick Moranis no saliese de su retiro para filmar un pequeño cameo, habría sido la guinda al pastel.

Resulta asombroso conocer que la película únicamente ha contado con un presupuesto de 75 millones (frente a los 144 de la película de 2016), pues perfectamente aparenta unos 125. Los F/X son buenísimos, tanto a nivel técnico, como en cuanto a diseño. La mezcla entre cgi y muñecos, es fantástica.

Respecto a la bso... ¡madre mía!, que diferencia entre la de ésta secuela y la del truño feminazi, aquí rescataron los míticos temas de la composición original de Elmer Bernstein, lo cual ayuda a que la película se sienta como una auténtica película de Cazafantasmas.

Mucha atención al final, pues hay dos escenas post-créditos.

Por el momento, la película lleva ingresados 190 millones a nivel mundial y aún falta por estrenarse en Estonia, Eslovaquia, Filipinas y Japón. En cualquier caso, la película ya puede decirse que ha funcionado bien, pues ha ingresado 2,5 veces su presupuesto. Ojalá Sony dé luz verde a una secuela.

No veo el momento de hacerme con la peli en formato físico para disfrutarla una y otra vez. Teniendo en cuenta que la produce y edita Sony, confío en poder conseguirla en su versión en 4K.

Nota: 8,5/10
 
Tengo ganas de revisionarla porque en la primera
estaba tan pendiente de cuando saldrían los originales que digamos no me metí del todo en la película. La revisión, sabiendo ya que salen solo al final, puede que me permita disfrutar aún más esos pequeños detalles de la nueva historia. Ya os contaré.
 
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