Es que no sé a qué espera la gente decente para despertar de una puta vez. Vivimos en una sociedad que nos ha costado muchísimo tiempo, sufrimiento y esfuerzo construir. Con sus defectos, no tiene que ser muy mala cuando todos la envidian. Es NUESTRA sociedad, son nuestros valores, y si no queremos perderlos, debemos hacerlos respetar.
Puedo aceptar que esa misma sociedad se ha construido a base de fusionar otras culturas a lo largo de los siglos y adoptar lo que de bueno tenían. Pero no acepto que esa fusión sea impuesta desde un permanente complejo que parece que nos abliga a tragar con TODO lo que otros quieran imponernos.
Me importa bien poco que me llamen racista. Es más, me suda mi polla blanca heterosexual. No lo soy. Pero no voy a aceptar que otros vengan aquí a decirnos como debemos vivir y a exigirnos pleitesía. Me parece estupendo que todo el mundo merezca una oportunidad, y lo defiendo. Pero esa oportunidad debe pasar por la aceptación de las normas de convivencia que nos rigen, y por aportar algo. Si vienes con una mano delante y otra detrás, fuera. Ya tenemos bastantes personas a las que ayudar aquí. Si no aceptas nuestras normas de convivencia, fuera. Has venido voluntariamente, asume lo que te espera. Si quieres imponernos tus costumbres, fuera. Lo que esperamos es que te adaptes a las nuestras, o al menos las respetes. Si atentas contra nosotros en la forma que sea, fuera. Aquí has venido a sumar, no a restar. Y por supuesto, si nos combates, FUERA. Pero en el sentido estricto.
Todo esto se resumiría en normas que tienen bastantes paises poco sospechosos de ser poco democráticos. Solo podrás entrar si demuestras que vas a aportar algo. Una empresa viable, un trabajo, una formación. Si no, vuelve cuando tengas algo que ofrecer. Si delinques estando aquí, tras cumplir tu condena, te vas a tu pais para siempre. Si te sorprendemos intentando entrar ilegalmente, lo mismo. Si tratas de matarnos por motivos ideológicos, te espera toda una vida en prisión o una bala en la cabeza. Y no hay más. Si te integras y aportas, te acogeremos y contribuiremos a tu bienestar. Si no, tendrás lo que mereces. Es lo justo y razonable. Y tu raza no tiene nada que ver.
Mientras Occidente no entienda eso, vamos camino al caos y la destrucción.