No complementa nada, porque el estudio que enlazo ya lo dice, y en las gráficas que he puesto se ve. La diferencia es que tiene en cuenta toda la vida del inmigrante, no solo cuando trabaja, también segmenta por región de origen, y además aborda también el balance de inmigrantes de segunda generación, donde, oh sorpresa, solo obtienen un balance positivo muy pocas de las 42 regiones de origen que se analizan, casi todas países occidentales, para variar. África occidental, Caribe, cuerno de África y Marruecos se llevan la palma en saldo negativo. Quién lo diría, no?
Pero es que esto es normal y esperable, joder.
La aportación "a las arcas del estado" de cualquier individuo no la define su raza ni su lugar de procedencia, sino su retribución.
Cuanto peor preparada esté una persona, menos oportunidades tendrá, menor retribución tendrá, y por lo tanto, menos contribuirá directamente a las pensiones. Es algo de cajón.
Obviamente, un mozo de almacén o un basurero siempre aportará menos a las arcas del estado que un ingeniero o un notario.
Ahora, cuál es la procedencia de un basurero? No sé en otras ciudades, pero en Lleida todos son negros. Todos. Y camareros, repartidores, trabajadores agrícolas y demás trabajos de poco nivel, están copados por inmigrantes.
Por contra, el autóctono medio -o sea, nosotros, incluido Seaker- tiene mejor retribución que el inmigrante, y por lo tanto aporta más.
El inmigrante que trabaja -que son la mayoría- aporta a las pensiones, pero sobre todo aporta en forma de servicios que nosotros no queremos hacer.
Si del estudio holandés quieres llegar a la conclusión de que "los inmigrantes son una carga para nuestra sociedad", estás muy equivocado. Confío en que no sea así.