Censura previa. Si quieres llevarte premios, tienes que hacer películas diversas. Ya hace tiempo, cuando escuché hablar del famoso (y completamente absurdo) test de Beschdel, me pregunté si ese no era el camino para una auto-censura brutal: si quieres que tu película llegue a algún sitio, hazla pensando en esta minoría, en esta, y en esta otra. Si no, directamente, podrás hacer tu película, pero por la puerta, sabes que no entra.
Hacer pasar a una obra artística por un filtro de cuotas es una aberración contra la libertad. De las fuertes. La "suerte" es que en este caso los Oscar están ya muy desacreditados, de hecho algunos lo usamos como filtro para saber que películas, directamente, NO perder el tiempo viendo, porque no son cine, sino propaganda.