Eso si te enteras. Ya has estado comiendo colorante de insectos
El nuevo pensamiento único
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Jesse Custer
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Manu1001
Au revoire.
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Oye, Paul, debemos de dejar de llamar momias a las momias...
Desventurados los moderados
No alinearse ni con la izquierda ni con la derecha, sino con ambos, ¡entre ambos! ¿Y para defender qué? Pues no se sabe bien
www.vozpopuli.com
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Manu1001
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Desventurados los moderados
No alinearse ni con la izquierda ni con la derecha, sino con ambos, ¡entre ambos! ¿Y para defender qué? Pues no se sabe bien
Joder, que gran artículo.
Gorobei
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No se lo cree nadie
Manu1001
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Como ya han dicho en infinidad de comentarios, si hace eso es por que le da la gana hacerlo, no porque esté obligada. Entre hacerse ochocientos kilómetros al día, y vivir a dos calles del trabajo, hay muchísimos pueblos intermedios baratos desde los que tardaría media hora en llegar.
Cuento, cuento, cuento...
Cuento, cuento, cuento...
¿Qué estupidez es esa?
tonirocker
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prohibir pasar de 2 hamburguesas a la hora y 4 helados al dia.
Manu1001
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Y eso lo controlan... ¿con cartillas de racionamiento? ¿Controlando todo lo que compremos eliminando el dinero en efectivo? Atacan con saña nuestras libertades, pero diciendo que es "por nuestro bien". Y aún hay gilipollas que se lo tragan y hasta lo defienden. Acojonante.
Dandreemex
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El código de circulación está para que no mates a los demás o no causes perjuicios innecesarios en la vía pública. Siempre puedes tirarte en parapente y no abrirlo que no está prohibido.
Dave Mustaine
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Brutal Benedicto..
«El Estado moderno del mundo occidental por un lado se considera a sí mismo como una gran potencia de tolerancia que rompe con las tradiciones insensatas y prerracionalistas de todas las religiones. Además, con su manipulación radical del hombre y la distorsión de los sexos a través de la ideología de género, se opone particularmente al cristianismo. Esta pretensión dictatorial de tener siempre la razón por parte de una aparente racionalidad exige el abandono de la antropología cristiana y del consiguiente estilo de vida, juzgado como prerracional. La intolerancia de esta aparente modernidad hacia la fe cristiana aún no se ha convertido en abierta persecución y, sin embargo, se presenta de manera cada vez más autoritaria buscando lograr, con la legislación correspondiente, la extinción de lo que es esencialmente cristiano».
«El Estado moderno del mundo occidental por un lado se considera a sí mismo como una gran potencia de tolerancia que rompe con las tradiciones insensatas y prerracionalistas de todas las religiones. Además, con su manipulación radical del hombre y la distorsión de los sexos a través de la ideología de género, se opone particularmente al cristianismo. Esta pretensión dictatorial de tener siempre la razón por parte de una aparente racionalidad exige el abandono de la antropología cristiana y del consiguiente estilo de vida, juzgado como prerracional. La intolerancia de esta aparente modernidad hacia la fe cristiana aún no se ha convertido en abierta persecución y, sin embargo, se presenta de manera cada vez más autoritaria buscando lograr, con la legislación correspondiente, la extinción de lo que es esencialmente cristiano».
