LoJaume
Desafinando
Bueno, como me han echado en cara que hable de Musk en un hilo sobre SpaceX , abro un hilo para hablar sobre este personaje. Para unos es un visionario, un tipo que despierta pasiones en las sonadas presentaciones de sus proyectos. Para otros, es un vendedor de humo, un charlatan y encima, peligroso.
En lo que estaremos todos de acuerdo es que es un genio para los negocios. Porque si es el tipo más rico del mundo, es que es un crack de los negocios.
Personalmente, no negaré sus éxitos en diversos campos porque son evidentes. Negarlos sería de necios.
Aunque también sería de necios negar las veces que Musk ha metido la pata prometiendo cosas que no ha cumplido. Que sea o no un bocazas no es opinable. Es algo objetivo, y ahí está la hemeroteca para comprobarlo.
Pero además de bocazas, creo que el tipo es un peligro público.
Hablando de memoria, ahí van unas cuantas:
. Colonización de Marte. Que el tipo prometa enviar a centenares de personas a Marte a partir de 2022, no deja de ser una bocachanclada de las suyas que no va a cumplir, entre otras razones porque no tendría ningún sentido. El problema aparece cuando anuncia sus planes de "terraformar" el planeta rojo, bombardeando los polos marcianos con bombas atómicas o cosas por el estilo.
.Red Starlink. No son pocos los científicos que alertan de que la proliferación de miles de satélites en órbitas bajas son un peligro potencial para desencadenar una catastrófica cascada de colisiones, que llenaría la órbita terrestre de chatarra espacial imposibilitando los viajes espaciales durante siglos.
. Neuralink. Dice Musk que a través de la conexión entre el cerebro humano y el ordenador, su empresa va a curar enfermedades como el autismo. Tanto da que los neurólogos digan que el autismo no es ninguna enfermedad. El tipo dice que lo va a curar y punto, que por algo él está desarrollando la tecnología necesaria.
Después de realizar una de sus demostraciones circenses con un pobre cerdo al que le implantó un chip en el cerebro -que en realidad no demostraba nada- ya anunció pruebas con humanos para el año pasado. Promesa que no cumplió, afortunadamente. Mientras, psicólogos y neurocirujanos de todo el mundo alertan de que la fusión del cerebro con la IA puede suponer el suicidio para la mente humana.
A mí, este hombre me recuerda a Walter Freeman, aquel neurocirujano que lobotomizaba a sus pacientes metiéndoles un picahielos por el ojo para rebanarles el cerebro. Aquel tipo también se convirtió en un fenómeno mediático, recorriendo el país con su flamante lobotomóvil, y realizando sus operaciones ante la prensa, como un showman. Efectivamente, Walter Freeman "curó" a más de 40.000 norteamericanos. Y cuando aparecían detractores, mostraba orgulloso un montón de cartas de los familiares de sus pacientes, quienes agradecían que hubiese acabado con sus dolencias, aunque de paso los dejaba permanentemente sedados al destruirles el lóbulo frontal.
Obviamente, Elon Musk tiene sus aciertos. Aunque para mí, su exceso de optimismo, de megalomanía, -y de dinero- suponen un peligro.
En lo que estaremos todos de acuerdo es que es un genio para los negocios. Porque si es el tipo más rico del mundo, es que es un crack de los negocios.
Personalmente, no negaré sus éxitos en diversos campos porque son evidentes. Negarlos sería de necios.
Aunque también sería de necios negar las veces que Musk ha metido la pata prometiendo cosas que no ha cumplido. Que sea o no un bocazas no es opinable. Es algo objetivo, y ahí está la hemeroteca para comprobarlo.
Pero además de bocazas, creo que el tipo es un peligro público.
Hablando de memoria, ahí van unas cuantas:
. Colonización de Marte. Que el tipo prometa enviar a centenares de personas a Marte a partir de 2022, no deja de ser una bocachanclada de las suyas que no va a cumplir, entre otras razones porque no tendría ningún sentido. El problema aparece cuando anuncia sus planes de "terraformar" el planeta rojo, bombardeando los polos marcianos con bombas atómicas o cosas por el estilo.
.Red Starlink. No son pocos los científicos que alertan de que la proliferación de miles de satélites en órbitas bajas son un peligro potencial para desencadenar una catastrófica cascada de colisiones, que llenaría la órbita terrestre de chatarra espacial imposibilitando los viajes espaciales durante siglos.
. Neuralink. Dice Musk que a través de la conexión entre el cerebro humano y el ordenador, su empresa va a curar enfermedades como el autismo. Tanto da que los neurólogos digan que el autismo no es ninguna enfermedad. El tipo dice que lo va a curar y punto, que por algo él está desarrollando la tecnología necesaria.
Después de realizar una de sus demostraciones circenses con un pobre cerdo al que le implantó un chip en el cerebro -que en realidad no demostraba nada- ya anunció pruebas con humanos para el año pasado. Promesa que no cumplió, afortunadamente. Mientras, psicólogos y neurocirujanos de todo el mundo alertan de que la fusión del cerebro con la IA puede suponer el suicidio para la mente humana.
A mí, este hombre me recuerda a Walter Freeman, aquel neurocirujano que lobotomizaba a sus pacientes metiéndoles un picahielos por el ojo para rebanarles el cerebro. Aquel tipo también se convirtió en un fenómeno mediático, recorriendo el país con su flamante lobotomóvil, y realizando sus operaciones ante la prensa, como un showman. Efectivamente, Walter Freeman "curó" a más de 40.000 norteamericanos. Y cuando aparecían detractores, mostraba orgulloso un montón de cartas de los familiares de sus pacientes, quienes agradecían que hubiese acabado con sus dolencias, aunque de paso los dejaba permanentemente sedados al destruirles el lóbulo frontal.
Obviamente, Elon Musk tiene sus aciertos. Aunque para mí, su exceso de optimismo, de megalomanía, -y de dinero- suponen un peligro.
Última edición: