Será por el tesón, por su empeño en resultar más desaforada entrega tras entrega, o por la buena química que
Vin Diesel (impulsor máximo de la franquicia), el difunto
Paul Walker, Michelle Rodriguez y el resto de su reparto han mostrado durante estos
14 años de carreras a velocidad absurda. Lo cierto es que la saga
Fast & Furious se las ha apañado para convertirse en una
rara avis: un serial de acción voluntariamente
over the top y descerebrado que no sólo llena salas hasta la bandera, sino que también despierta simpatía entre los críticos. Aprovechando esa coincidencia de opiniones entre
fandom y expertos, los responsables de la saga dieron la campanada en el festival
South By Southwest de Austin (Texas), anunciando el domingo por la noche
una proyección sorpresa de Fast & Furious 7. Dicho pase despertó el previsible
tsunami en redes sociales, y al correr de las horas (conforme la adrenalina iba bajando y los ánimos iban volviendo a la normalidad) se ha traducido en un reguero de críticas, a cuál más encomiástica.
Más allá de los veredictos particulares, que puedes leer a continuación, las opiniones son casi unánimes:
James Wan se luce de lo lindo reemplazando a
Justin Lin tras la cámara, las estrellas invitadas como
Jason Statham, Kurt Russell y
Tony Jaa cumplen sobradamente, las escenas motorizadas (
con o sin coches voladores) resultan más inverosímiles y espectaculares que nunca, y en general el filme resulta tanto una destilación de las virtudes de la franquicia como una emotiva despedida para Walker, que falleció en Valencia (California) a resultas de un accidente de automóvil en 2013. ¿Estaremos de acuerdo cuando el filme se estrene en España, el
3 de abril?
Russ Fischer (Slashfilm): “He visto un montón de películas tontas, y
Fast & Furious 7 está entre las más tontas de todas.
Puede que ésto sea un cumplido. Yo ya no me aclaro”.
Perri Nemiroff (Collider): “Salvo por un fallo de guión,
Fast & Furious 7 tiene todo lo que puedes pedirle [a una nueva película de la saga].
Las persecuciones de coches son absolutamente demenciales, y llevan a un nuevo nivel las escenas de acción de la franquicia. Nunca faltan el descaro, el humor y los one liners absurdos e inolvidables (…).
Fast & Furious 7 es, indudablemente, una película palomitera empeñada en ofrecer momentos de impacto, pero también rebosa con sentimiento y pasión. Los personajes se preocupan mucho los unos de los otros, y esa devoción resulta infecciosa. Pese a ello, hay una carencia notable en lo que respecta a los actores principales, y es que la mentalidad de equipo ya no es tan fuerte como lo era en
Fast & Furious 6″.
Matt Singer (Screen Crush): “Con casi total seguridad,
Fast & Furious 7 no será la última película de
Fast & Furious. Pero, por momentos, parece la despedida del serial. Abundan los guiños y los homenajes a los 15 años de historia de la franquicia. Las escenas de acción son más grandes y demenciales que nunca, y cuesta imaginar que alguien pueda superarlas. Y, antes de que las persecuciones se pongan en marcha, el tono es, a menudo, de elegía. (…)
Es imposible ver esos momentos y no pensar en Paul Walker. (…) El director
James Wan, un hombre conocido hasta ahora por sus películas de terror como
Expediente Warren e
Insidious, sustituye en
Furious 7 al responsable habitual de la franquicia,
Justin Lin, pero las imágenes no se resienten por ello: cuando llega el gran final, Wan hace malabares con tres o cuatro tramas paralelas e interconectadas, y lo hace con una soltura y una precisión de la que aún carecen muchos veteranos del cine de género”.
Eric Eisenberg (Cinemablend): “Lo que los espectadores le piden al serial son escenas de acción tan disparatadas que parecen de animación, y la buena noticia es que
Fast & Furious 7 las entrega a manos llenas. (…) Lo malo es que
Fast & Furious 7 es
una película que no te apetece analizar en ningún aspecto referido a su trama, y eso es algo que le quita a la experiencia una buena parte de la diversión. (…) En reconocimiento del guionista
Chris Morgan, hay que admitir que la película se esfuerza en ofrecer un tema de fondo: los conceptos de la familia y la pérdida tienen un gran peso en la narración, debido a la prematura muerte de Paul Walker (una tragedia a la que la película alude con respeto y sincera emoción). Pero, a la vez, la franquicia es consciente de cuál es su esencia a estas alturas, y lo acepta sin reparos”.
Brian Particelli (TooFab): “Antes de que empezara el pase, el productor
Neal Moritz le pidió al público que no le
spoilease el destino de
Brian O’Conner [el personaje de Paul Walker] a aquellos que no hubieran podido ver el filme. No vamos a contaros el final, pero sabed que
las escenas entre Jordana Brewster y Paul, y entre Vin Diesel y su ‘hermano’, os harán llorar. Da la impresión de que todos los implicados se esforzaron al máximo para ofrecerle una buena despedida a Walker, y para satisfacer a los
fans que llevan apoyando a la franquicia desde su comienzo”.
Tim League (de los cines Alamo Drafthouse): “Cuando haya inventado la máquina del tiempo, voy a coger por banda a los hermanos Lumiére y me los llevaré a que vean el esplendor de
Fast & Furious 7″.
Jen Yamato (The Daily Beast): “Los huesos crujieron. Los coches volaron. Las lágrimas corrieron. Y, al final de la primera proyección pública de Fast & Furious 7, dos palabras expresaron todo lo que la familia Fast & Furious tenía que decir: “Para Paul”.
Scott Weinberg (Nerdist): “Básicamente, si eres la clase de persona que se mete con las escenas de acción cuando éstas resultan impracticables en la vida real, esta
peli te dará razones suficientes para quejarte durante los próximos dos años. Por el contrario, si estás dispuesto a seguirle el juego a un absurdo espectacular que disfruta empleando las leyes de la física como reglas opcionales, seguramente serás ya un fan de la franquicia, y te gustará saber que
Fast & Furious 7 es
el capítulo más demencialmente entretenido de toda la franquicia (seguido de cerca, eso sí, por Fast & Furious 5). (…) Sin destripar mucho la trama, baste decir que esta película incluye una batalla de lo más épica entre
Dwayne Johnson y
Jason Statham. ¡Y esa es sólo la tercera o cuarta mejor escena de acción del filme! (…) Y, además, en esta sale
Kurt Russell. Eso es como una especie de
bonus especial”.
Peter Hall (Movies.com): “Fast & Furious 7 es la clase de película en la que te crees que Paul Walker puede enfrentarse a un artista marcial como
Tony Jaa, y que
Michelle Rodriguez es una digna rival para la luchadora de artes marciales mixtas
Ronda Rousey. Es una película que puede mostrar a Kurt Russell interpretando a un superagente secreto del gobierno (y experto en cervezas belgas) y seguir teniendo sentido, y en la que no te planteas ni por un segundo el hecho de que una
hacker de élite
(Nathalie Emmanuel, de
Juego de tronos) parezca una ‘chica Bond’ demasiado guay para aparecer en una película de
James Bond. (…) Ese equilibrio no es ni fácil ni envidiable, pero, una vez más, la banda
Fast & Furious lleva a cabo lo imposible”.