El Universo es inmensamente grande -o mejor dicho, grande de cojones- pero solo en nuestra Via Láctea se calcula que hay cuatrocientos mil millones de planetas.
Si en Marte hubiese rastros de vida, quiere decir que solo en nuestra galaxia podría haber millones de planetas con algún tipo de vida.
La Tierra ya no sería ese planeta único, con unas condiciones únicas, capaz de desarrollar vida. Incluso el planeta vecino y el primero que analizamos, un planeta rocoso "del montón", también fue capaz de desarrollar vida.
Y por qué no, muchos de ellos podrían haber desarrollado vida inteligente. Para encontrar vida inteligente no haría falta rastrear todo el Universo, ni mucho menos. La vida inteligente en el Universo sería algo tan común, que con una pequeña parte rastreada sería suficiente.
Ahí es donde cobraría sentido la teoría del Gran Filtro. De existir vida inteligente, algo provoca que duren muy poco. El descubrimiento de vida en Marte abriría un montón de reflexiones científicas y filosóficas.