Ahhhh... "No existe". Claro. Si no te gusta, no existe
que eres un tío serio, guapo no, pero serio si, y sabes que la democracia que hay y que rige vigente por ley votada por todos los españoles, no os vale y algunos de los que quieren la independencia intentaron saltársela, socavarla violentamente, con apariencia pacífica de performance democrática cuentista. Que se les impidiera, además de un ataque a su vanidad, arrogancia y soberbia, fue una bofetada a su ensoñación de definición de democracia, que es la de tergiversar la realidad para adaptarla a mi voluntad, solo así la democracia es plena, cuando se adapta a ella.
Democracia es aceptar las reglas del juego votadas SIEMPRE con anterioridad, NO ES VOTAR SIEMPRE hasta que salga lo que quieres. Esto es básico entenderlo. Los indepes apelan a la democracia como algo que representa lo que está pendiente de pasar cuando la esencia de la democracia es respetar lo que ha pasado. Aceptar los resultados, respetar lo elegido, usar los mecanismos pactados. Siempre aceptar lo sucedido, lo pasado, para ser considerado democrático. No que para ser considerado democrático hayas de aceptar lo que tenga que pasar. Y aquí entra un segundo matiz que también se pierde. Las mayorías cualificadas que se exigen en algunas leyes para ser cambiadas, también han sido votadas por el pueblo, bajo las normas y tutela de una constitución refrendada específicamente por el pueblo, elaborada por un legislativo votado por el pueblo y el hecho de nacer o acceder a la nacionalidad en un estado en el que ya existe ese derecho jurídico, te obliga a obedecerlo, te guste o no. ESO Y NO OTRA COSA es la democracia. El resto de requiebros y contorsiones no cambia la verdad del invento.
Los que no aceptan lo pasado y pervierten la democracia en su nombre con contorsiones y requiebros lo intentan haciendo ver que tal democracia no lo es. Los únicos peligros reales de una democracia sólida son los traidores y hoy tenemos uno de presidente. Un trilero que engaña para mantenerse en su puesto y en parte para imponer una ideología de tapadillo que no es la de su partido pero que hasta ellos logró engañar. Un narciso al que su narcisismo está desenmascarando más rápido de lo que él éxito de su plan requeriría pero así son los estúpidos que se miran tanto en el reflejo del estanque. Se acercan tanto que al final se caen.
Mientras aquí perdiendo el tiempo.