EL PAÍS
La hipótesis de Washington es que probablemente eran artilugios inofensivos de carácter comercial o de investigación
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Es que es todo tan ridículo...
Ahora que tengo un rato voy a hablar de globos estratosféricos de aficionados.
Desde hace varios decenios hay una comunidad de tipos que lanzan globos de helio a la estratosfera. La cápsula debe llevar como mínimo un GPS para saber la posición y un transmisor de radio para transmitirla. También debe llevar la o las baterías correspondientes para alimentar la electrónica. Los componentes van metidos en una caja de porexpan recubierto de papel de aluminio para reflejar el radar de los aviones y evitar accidentes. La cápsula podría pesar un kilo, y para subirla es necesario un globo de látex conteniendo bastante helio.
Todo el equipo costaba bastante pasta (sobre los 500-1000 eur) por lo que la mayoría de las cápsulas se intentan recuperar. La idea es que el globo estalle automáticamente al llegar a cierta altura -el globo aumenta de tamaño al descender la presión exterior- y en su fase de descenso se despliega un paracaídas. La duración estimada del vuelo es de unas 4 horas y el seguimiento y recuperación se realiza con un vehiculo que recorrerá unos pocos kilómetros. Aún así, se pierde el globo de látex y el helio, que es bastante caro.
También existía la posibilidad de enviar globos "flotantes" que recorren largas distancias, aunque esto implica perder definitivamente la cápsula. Además, deben llevar una batería mayor, lo que implica un mayor tamaño del globo y más helio.
Ahora la tecnología ha evolucionado mucho y en una minúscula placa es posible incluir el GPS, la radio, la antena, y sensores de temperatura, humedad y presión, que luego se transmite a una red global de estaciones de seguimiento. Como todo esto consume menos de 0.5w, ya no es necesaria batería, sino una pequeña placa solar, que además de no pesar nada asegura la alimentación todo el tiempo que haga falta.
Ahora el equipo apenas pesa 10 gr, por lo que tampoco es necesario un globo de látex y un montón de helio, sino un sencillo y ligero globo de mylar como los de las celebraciones. Todo el equipo apenas cuesta 50 euros.
Con todo ello, ahora muchos aficionados lanzan globos de flotabilidad. Es decir, renuncian a recuperar la cápsula, y calculan la cantidad de helio para que el globo no estalle y quede estabilizado a cierta altura durante días o semanas a merced de los vientos, sobrevolando un montón de países. Sin moverse de la silla realizan el seguimiento de la posición y la telemetría a través de distintas webs.
Con este panorama, es de esperar que ahora mismo haya un montón de objetos inofensivos flotando a 10.000-30.000 metros por encima de cualquier sitio.
No me extrañaría nada que algun objeto derribado desde un caza sea algun globo de éstos.