Pues a medida que pasa el tiempo, el aeropuerto de Kabul se convierte más y más en una especie de merienda de negros. Perdonad está expresión racista para representar el estado de este aeropuerto. Los americanos dicen que podría haber atentados por parte de grupos rebeldes tipo ISIS de Afghanistan, lo que no se si sirve para que la administración de Biden de un mayor dramatismo a la situación de sus fuerzas sobre el terreno. El caso es que entre hoy y mañana se espera que muchos países terminen su misión. Así parece que quiere que actúen ya los EEUU para que estos puedan recoger el petate e irse el 31 de agosto llevándose a sus últimos soldados mientras dejan el aeropuerto libre para sus socios talibanes.
Y es que toda esta humillación occidental, parece que deja de lado esa asociación talibana dónde los señores de la guerra respetan la huida de los infieles, aunque poco a poco van tomando el control, no dejando que más afganos se acerquen. Mientras se reúnen con ellos en un país como Qatar, que en un acto de justicia divina poco menos que debería ser objeto de bombardeos. Porque vamos, son ganas de blanquear a esos hijos de puta que por detrás van apuñalando mientras se hacen los amigos, se llevan mundiales y Grandes Premios de F1 (es posible que este año se celebre una carrera allí).
Y mientras, España como tonto útil como hub de traernos afganos, porque si algo sabe Pedro Sánchez es hacerse fotos para que nos comamos los marrones de su política solidaria. Otro objetivo a bombardear. La UE no sabe que hacer con lo que tenemos en Torrejón.