La destitución de vilda, una más del estado de excepción ideológica que vivimos. Como en Irán. Al que piensa ligeramente diferente se le cancela, una ejecución pública de su condición de persona y ciudadano. Me repugna y es más peligroso que el hecho de dar un pico. El fascismo es eso y los ignorantes no lo ven.
El gran Carvajal, que tenga que decir esto de un merengue, ha hablado con criterio criticando la actuación de Rubiales y a la vez diciendo que la condición de víctima la establecen los juzgados. Verdad absoluta nivel dios. Pues le están dando. Marc crosas, gilipollas tipo Borja Iglesias 2, que viste con pintas de monguer, se ha metido con él por no considerar que jenni no es aún víctima por no denunciar y que los tribunales no se hayan posicionado. Tonto, que eres tonto, como la ostia de españoles que se sienten visibles e importantes por participar de un colectivo, aunque sea de fascistas.