Respuesta: Películas que vais viendo en casita
13 asesinos (2010, Takashi Miike)
Es ya más de una década viendo las pelis de Miike. Para mí significó un soplo de aire fresco, de gañanada punkarra, en la visión clasicista y llena de clichés del cine oriental que tenía entonces. Miike era diversión y provocación pura; inocuo pero no por ello menos divertido.
Como suele pasar en estos casos, he ido viendo como Miike ha ido prosperando hasta convertirse en uno de los directores más taquilleros de Japón, con cameos en pelis como Hostel y con participación del mismo Tarantino en una de sus pelis. Era inevitable. Los que disfrutamos con "Visitor Q" sabiamos que solo podían pasar dos cosas: que Miike muriera de forma absurda o que alcanzara la fama mainstream. Fue lo segundo. Nadie es perfecto.
Si algo adoro de Miike es que nunca dejará de ser el mal estudiante de cine que disfrutaba rodando películas directas a vídeo para "paletos de pueblo", como el mismo definía sus primeras películas en una entrevista. Y lo acojonante es que lo decía con nostalgia. Eso es fundamental para entender a Miike. Miike es, descrito de forma técnica, un puto mongolo con talento.
En otra entrevista le preguntaban como elejía los guiones que rodaba. Imperturbable, como la mayoría de los japoneses, decía que según le iban llegando. ¿Quién era él para decidir si un guión merecía ser rodado o no? Acojonante. Un monstruo.
"13 asesinos" es una peli de gran presupuesto de un Miike que ya no rueda cuatro barbaridades por año, en vídeo y a toda velocidad. Miike ahora es un director serio al que se le pide un nivel, supongo. Miike logra dar ese nivel, que ya lo hacía con sus primeras producciones, que envidiarían muchos directores que cuidan más sus "productos". Hasta parece "clásico" en muchas escenas. Pero nunca deja de ser el gañán primordial que fue y es.
"13 asesinos" es un chambara de corte canónico en sus planteamientos, no muy diferente a películas como "Los siete samurais" o "47 ronin" (Kurosawa y Mizoguchi, ahí es nada). Pero Miike no duda en abandonar el clasicismo y entrar a saco en el desbarre. Y así tenemos un malo impresionante, un samurai psicópata hermano de shogun, aburrido de su vida acomodada y de su condición de samurai decorativo. Tenemos a un montañés, heredero directo de Mifune en "Los 7 samurais", que se folla a todas las mujeres de un pueblo dejándolas agotadas y aún le quedan fuerzas para sodomizar al alcalde. Tenemos una hora de MASACRE TOTAL que va degenerando en algo indescriptible y que se cierra con un plano secuencia magistral.
Todo se resume en ese enfrentamiento final entre el samurai psicópata el samurai "heroico".
"Gracias por hacerme pasar el día más emocionante de mi vida"
"De nada"
Y lo decapita.
"13 samurais" es, quizás, la obra maestra de Miike en una filmografía llena de obras maestras del despropósito y de la búsqueda de la diversión pura vía el gamberrismo y la desestructuración de géneros y clichés narrativos. ¡Si aquí hasta hay un personaje que resucita con un chiste!
Nunca le dejaré de agradecer esos visionados emocionantes. Aunque pierda la cabeza por su culpa.