Respuesta: Películas que vais viendo en casita
- Mat (La madre, 1926), de Vsevolod Pudovkin
Me ha sorprendido leer a
sikander que esta película no tiene fuerza, cuando es la hostia. Quizás redunde bastante en la metáfora del agua, o haya cosillas como planos que descolocan en lo espacial (sin que yo les encuentre justificación), o algún momento forzado de los actores, pero son cosas muy disculpables entonces que no empañan la impresión que deja el punto fuerte, que es el montaje.
Porque va como un puto tiro. Y no solo en el ritmo general, sino en sacar de los momentos álgidos pura emoción gracias al medido inserto de detalles y primeros planos. Escenas como la pelea en la taberna (y en general toda la escalada al aborto de huelga), la llegada de la primavera y el brote de "locura" del hijo son ejemplos, con planos que buscan y consiguen el impacto y el desasosiego, como ese niño riéndose de forma casi violenta o ese preso mirando a cámara, advirtiendo, convenciendo. Otros detalles son el delicado uso de las manos, o el retrato a mala hostia de los jueces y ricos zaristas, con el chaval que vitorea a los manifestantes y recibe una colleja de su padre, solo para recoger su gorra militar ya empapada por la revolución.
Todo el tramo final es impresionante, desde el arranque de la manifestación, la recogida de la primera piedra (sin cortes de igual duración para cada intento, como harían ahora), hasta el encuentro de la madre y el hijo, y la estremecedora carga final que te vuelve comunista.
Otras cosas en el debe, que algunas decisiones de montaje también son demasiado alegres (minucias); el problema asumido de los títulos (aunque a veces se aprovechan bien para la narración); y los efectos y música en algún momento. Los primeros por no hacer en realidad falta, la segunda porque fuerza demasiado algún pasaje del principio.
Vamos, que me dan a elegir entre el Potemkin y esta, y no me lo pienso.