A mi tampoco me gustaba la saga Souls y los juegos de su estilo por eso mismo que comentáis, hasta que un día me puse con Bloodborne. Tiré la toalla varias veces, pero algo me empujaba a volverlo a intentar, además de que varios compañeros aquí en el foro me animaban a seguir.
Y un día, de buenas a primeras, entendí la filosofía del juego. Da igual que te maten mil veces, de verdad. Es un trámite, forma parte del juego. Ese día, cuando comprendí la mecánica, algo hizo click en mi cabeza y me enganché con este juego como hacía muchos años no me pasaba, por no decir que es el juego que más me ha enganchado en mi vida.
De hecho, no me he terminado el juego porque lo dejé como el tabaco: estaba acabando con mi salud. Me obsesioné, me pasaba el día pensando en el juego, deseando que se durmieran las niñas para poder volver a inyectarme esa droga. Me volví verdaderamente adicto, pasó de ser un entretenimiento a ser una obsesión enfermiza.
Os puedo asegurar que pocas experiencias jugables he tenido que se hayan acercado un poco a la satisfacción que he sentido con este juego... Ahí lo tengo, esperando a que pueda encadenar un par de días libres... Volveré, lo terminaré y acabaré sacando el platino, por mis pelotas.
Puede que os parezca exagerado, pero mi visión del videojuego en general cambió cuando comprendí Bloodborne. Es una verdadera obra maestra. Y, por lo que cuentan, los otros juegos de From no se quedan atrás.
Joder, qué ganas me han entrado de jugarlo.