Iba a postear esto en el post de Películas vistas en casa, pero luego he pensado que, que narices, abro un post temático para comentar cualquier adaptación al cine del famoso detective. Porque él (y Doyle) se lo merece(n).
Elemental, Dr. Freud (The Seven-Per-Cent-Solution). Herbert Ross, 1976
Estas últimas semanas he estado viendo varias adaptaciones basadas en la obra de Conan Doyle, y de todas ellas éste es el título que me ha impactado más, por varios motivos, entre ellos el hecho de que creo se trata de un título "menor" de entre todos ellos. Siempre se destacan los mismos: las obras de Rahtbone, de Brett, El sabueso de los Baskerville de Fisher o incluso la peli de Wilder. Pero raramente encontraba este título como uno de los más destacados. Y sin embargo, me ha parecido una de las mejores adaptaciones hechas hasta la fecha.
La historia arranca con la presentación de un Sherlock neurótico, con dependencia a la droga, y preocupado tras haber descubierto la existencia de alguien llamado Moriarty detrás de muchos crímenes cometidos en Londres. Cuando recibe una visita de Watson, este ve el estado de su amigo y decide que el mejor modo de ayudarle es concertarle una visita con, ni más ni menos, Sigmund Freud. Para conseguir movilizar a Sherlock de Inglaterra trazará un plan junto a Mycroft Holmes (el hermano) para llevarlo a Viena.
En realidad se trata de la adaptación de una novela escrita por Nicholas Meyer. Lo que diferencia esta adaptación de muchas otras es el tono más abiertamente aventurero de la historia y el drama psicoanalítico. Aquí existen dos misterios, uno que concierne al propio sherlock, y otro que será el caso a resolver de la historia. Sin embargo, la película se decanta más por el dinamismo y la acción de unos personajes activos en todo momento. Las obras originales ya tenían un punto más aventurero, y si en "El signo de los cuatro" teníamos una persecución a través del Tamesis, aquí tenemos una genial carrera entre dos trenes donde los personajes sacan a relucir sus habilidades físicas.
Repitiendo lo comentado más arriba, cuando se habla de las mejores encarnaciones del personaje, siempre salen dos nombres: Rathbone y Brett. Se lo merecen, sin duda. Nicol Williamson crea aquí una versión muy diferente de lo que la gente estaba acostumbrado a ver. Este Sherlock no solamente es inteligente, sino además muy ágil, fuerte, con dotes para la lucha (en los relatos ya se avanzaban sus competencias físicas para la lucha), y lanza sus deducciones con una labia rápida, clara y segura. Si se merece estar ahí arriba junto a Rathbone y Brett es porque esta versión es claramente precursora del Sherlock moderno, interpretado ya sea por Downey Jr, o sobretodo, el de Cumberbatch. Está claro que Moffat y Gatiss tomaron nota de esta película para su adaptación televisiva.
A pesar de no ser una historia tan definitiva como la del sabueso, se trata de una película que muestra todas las facetas del personaje descritas en los originales. Se beneficia además por un gran Watson de la mano de Robert Duvall, aquí presentado como alguien estoico y con mucho carácter, la presencia de Laurence Olivier como el profesor Moriarty, aunque su papel en la historia no sea el que uno esperaría de entrada, y de Alan Arkin como Freud. Esos pastiches de personajes son un poco raros, pero si el cine ya había enfrentado a Sherlock contra Jack el detripador, ¿porque no ponerlo junto a Freud?.
En resumen, que se trata de un título muy recomendable sobre el personaje. No os lo perdáis.
Ya que estoy con este ciclo, iré comentado otras películas.
Elemental, Dr. Freud (The Seven-Per-Cent-Solution). Herbert Ross, 1976
Estas últimas semanas he estado viendo varias adaptaciones basadas en la obra de Conan Doyle, y de todas ellas éste es el título que me ha impactado más, por varios motivos, entre ellos el hecho de que creo se trata de un título "menor" de entre todos ellos. Siempre se destacan los mismos: las obras de Rahtbone, de Brett, El sabueso de los Baskerville de Fisher o incluso la peli de Wilder. Pero raramente encontraba este título como uno de los más destacados. Y sin embargo, me ha parecido una de las mejores adaptaciones hechas hasta la fecha.
La historia arranca con la presentación de un Sherlock neurótico, con dependencia a la droga, y preocupado tras haber descubierto la existencia de alguien llamado Moriarty detrás de muchos crímenes cometidos en Londres. Cuando recibe una visita de Watson, este ve el estado de su amigo y decide que el mejor modo de ayudarle es concertarle una visita con, ni más ni menos, Sigmund Freud. Para conseguir movilizar a Sherlock de Inglaterra trazará un plan junto a Mycroft Holmes (el hermano) para llevarlo a Viena.
En realidad se trata de la adaptación de una novela escrita por Nicholas Meyer. Lo que diferencia esta adaptación de muchas otras es el tono más abiertamente aventurero de la historia y el drama psicoanalítico. Aquí existen dos misterios, uno que concierne al propio sherlock, y otro que será el caso a resolver de la historia. Sin embargo, la película se decanta más por el dinamismo y la acción de unos personajes activos en todo momento. Las obras originales ya tenían un punto más aventurero, y si en "El signo de los cuatro" teníamos una persecución a través del Tamesis, aquí tenemos una genial carrera entre dos trenes donde los personajes sacan a relucir sus habilidades físicas.
Repitiendo lo comentado más arriba, cuando se habla de las mejores encarnaciones del personaje, siempre salen dos nombres: Rathbone y Brett. Se lo merecen, sin duda. Nicol Williamson crea aquí una versión muy diferente de lo que la gente estaba acostumbrado a ver. Este Sherlock no solamente es inteligente, sino además muy ágil, fuerte, con dotes para la lucha (en los relatos ya se avanzaban sus competencias físicas para la lucha), y lanza sus deducciones con una labia rápida, clara y segura. Si se merece estar ahí arriba junto a Rathbone y Brett es porque esta versión es claramente precursora del Sherlock moderno, interpretado ya sea por Downey Jr, o sobretodo, el de Cumberbatch. Está claro que Moffat y Gatiss tomaron nota de esta película para su adaptación televisiva.
A pesar de no ser una historia tan definitiva como la del sabueso, se trata de una película que muestra todas las facetas del personaje descritas en los originales. Se beneficia además por un gran Watson de la mano de Robert Duvall, aquí presentado como alguien estoico y con mucho carácter, la presencia de Laurence Olivier como el profesor Moriarty, aunque su papel en la historia no sea el que uno esperaría de entrada, y de Alan Arkin como Freud. Esos pastiches de personajes son un poco raros, pero si el cine ya había enfrentado a Sherlock contra Jack el detripador, ¿porque no ponerlo junto a Freud?.
En resumen, que se trata de un título muy recomendable sobre el personaje. No os lo perdáis.
Ya que estoy con este ciclo, iré comentado otras películas.