Ya es meritorio tragarse el discursito de John Galt, pero a partir de ahí el libro se quita del todo la careta y hace de Mein Kampf un libro infantil. El discursito cuenta con 70 hojas. Es el anticlimax del libro, una tortura. Más si cabe cuando el mensajito de Rand nos había quedado bastante claro en todas las páginas anteriores. Pero no, después ya leyendo el final he reflexionado y todo... Gente guapa, superperfecta, atlética, robots... Su propia personalidad es absolutamente irracional. Toma ya... Y después vamos a rescatar al superperfecto Galt a tiros, like heroes... Seguro que los que leen el libro en las profundidades de Texas ven como la heroina mete un tiro a traición a un guardía y dicen ¡toma ya! Y es que en este "tratado filosófico" el fin debe justificar los medios... Y que fin... La quebrada es como esos pueblos perdidos que fundaron los nazis en países como Uruguay y Argentina cuando se acabo el chollo. Todo con gente selecta, eso sí... ¡Qué vivan los empresarios!