Y yo no llamaria a lo que han estrenado ahora "miniserie". Es una temporada normal y corriente, con identica estructura a las anteriores. Lo unico que pasan de 24 a 13 capitulos, pero eso ha pasado con multitud de series y no por ello a las temporadas con menos episodios se les llama miniseries.
Tú puedes pensar lo que quieras, pero en Fox no la están promocionando como "24, novena temporada", sino como "24: Live another day", como un evento independiente. Y de hecho la serie se ha producido sin intención de continuidad futura (otra cosa es que sea un éxito y la Fox quiera hacer más temporadas). ¿Que en el fondo es una "novena temporada"? Claro que sí. Obviamente, la serie es continuación directa de las 8 temporadas anteriores (sería absurdo si no lo fuera), pero en la Fox la están vendiendo como historia independiente. ¿Por qué? Pues porque la Fox no sólo quiere atraer a los viejos fans, sino llamar la atención de nuevos espectadores. Si dices "novena temporada", mucha gente directamente ya ni le da una oportunidad, pero si dices "miniserie", la gente piensa "una miniserie es algo cortito, no me va a llevar demasiado tiempo, le voy a dar una oportunidad".
Cuando una serie tiene tantas temporadas a su espalda, eso echa para atrás a muchos potenciales espectadores (no hace mucho discutimos esto en otro hilo de este mismo subforo) porque se crea la ilusión de que no se van a enterar de nada o de que se van a perder muchas cosas importantes, cuando en realidad no es así. La información verdaderamente relevante para el seguimiento de una historia se repite constantemente.
24 es Bauer y cada temporada se alimenta de como el personaje va evolucionando a raiz de las jodiendas que le hacen en las temporadas anteriores, con lo que empezar por la 9º temporada es quedarte en la superficie del personaje y de la serie.
Una serie no deja de ser una suma de pequeñas historias. Es cierto que, ir construyendo una historia grande a lo largo del tiempo es uno de los mayores atractivos de las series (y por eso prefiero las series a las películas), pero también creo que cuando una series verdaderamente buena, no sólo es disfrutable en su conjunto, sino también lo son cada una de sus historias independientes.
Recuerdo que el primer cómic de Spider-Man que leí fue la saga de la muerte de Jean DeWolff, correspondiente a los números 107-110 de
The Spectacular Spider-Man (1985). Y empecé por ahí porque fueron los primeros cómics de Spider-Man a los que tuve acceso. Seguro que lo ideal hubiera sido haberme leido antes los 106 números anteriores de la colección, más los doscientos y pico números de
The Amazing Spider-Man, pero desgraciadamente, en aquél momento era imposible. Pero leí el cómic y me encantó la historia. No necesitaba conocer los 22 años previos de publicaciones sobre el trepamuros para disfrutarla. ¿Me perdí algunos detalles? Posiblemente sí. Tampoco creo que haga falta captarlo todo; por lo general, tendemos a olvidar el 99% de las historias, y sólo perduran en el recuerdo los aspectos que más nos han impactado emocionalmente. Y a lo largo de toda mi vida he ido leyendo cómics de Spider-Man, jamás en el orden cronológico de publicación, sino a medida que iban cayendo en mis manos, y nunca dejé de disfrutarlos por no haber empezado desde el principio, o por no seguir un orden concreto. Sé que lo ideal sería empezar desde el primer número publicado (
Amazing Fantasy 15, 1962) hasta el último, por orden cronológico, pero no tengo todos los miles de cómics que se han publicado en estos 52 años, y aunque los tuviera, me daría un perezón enorme leerlos todos.
A día de hoy, conseguir una serie o una colección de cómics completos es sencillo, pero hasta hace pocos años, no lo era. Los que leíamos cómics o veíamos series, las empezábamos desde donde podíamos. Y a pesar de que muchas veces nos veíamos obligados a consumirlas de manera mutilada y/o desordenada, lo cierto es que se disfrutaban igual, y con el tiempo el rompecabezas se va armando en tu cabeza.
Por no hablar que te van a spoiler a base de bien, solo en el primer episodio hay no menos de una docena de referencias a sucesos clave de las pasadas temporadas.
Se puede empezar una historia y descubrir al final la identidad del asesino, o se puede saber primero la identidad del asesino y luego descubrir la cadena de eventos que le llevaron a cometer el crimen. Se puede ver la historia de cómo el agente antiterrorista más sobresaliente se acaba convirtiendo en el enemigo público número 1... o se puede ver la historia de cómo el enemigo público número 1 llegó a esa situación.
En ese sentido, siempre he pensado que los seriales son un poco como "Rayuela", la célebre novela de Cortázar: uno hay un único orden de lectura correcto, no siquiera todos los capítulos son imprescindibles, aunque su lectura ayude a enriquecer el conjunto.
Jack Bauer nunca ha sido un policía, así que para haber seguido toda la serie desde el principio no parece que te hayas enterado demasiado de qué va